17 de agosto: «Liberar la Patria»
Propuesta elaborada por el Programa Educación y Memoria del Ministerio de Educación de la Nación, en el marco de la colección “El Género de la Patria”, para abordar esta efeméride en los niveles Inicial, Primario y Secundario.
Creado: 21 mayo, 2021 | Actualizado: 28 de diciembre, 2023
La colección “El género de la Patria” es una apuesta para conocer y reflexionar sobre la historia desde una nueva agenda de derechos, una oportunidad para profundizar el nexo entre efemérides y democracia. Por esta razón, proponemos pensar las luchas por la independencia de la “Patria Grande” entrelazando la historia de vida de José de San Martín con la de Juana Azurduy, una de las más destacadas lideresas de las guerras independentistas, recuperando el carácter plural y popular de la emancipación americana desde la vida de una mujer, mestiza, revolucionaria y sudamericana.
La Colección completa “El Género de la Patria”, se encuentra disponible en el Portal Educ.ar.
¿Qué se recuerda el 17 de agosto?
El 17 de agosto se conmemora el paso a la inmortalidad del General José de San Martín Matorras, quien falleció en Boulogne Sur Mer, Francia, en 1850. San Martín es una de las figuras más destacadas de la historia argentina y latinoamericana, a tal punto que por su actuación durante las luchas por la independencia en Sudamérica se transformó en una referencia mundial de los procesos de descolonización.
San Martín nació en Yapeyú, hoy provincia de Corrientes, un 25 de febrero de 1778. Hijo de Juan de San Martín, teniente gobernador de Yapeyú, y de Gregoria Matorras, su familia partió a Cádiz cuando tenía apenas 5 años. En España se formó como militar, peleó contra las tropas napoleónicas y ascendió de capitán de caballería al de teniente coronel por su papel en la Batalla de Bailén (1808). Pero al enterarse de los hechos de Mayo de 1810, decidió pedir el retiro del ejército español. Su vida cambiaría radicalmente con esta decisión.
En 1812, San Martín retornó a Buenos Aires, donde se puso al servicio de la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Tenía 34 años. Se le encomendó la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo, el cual tuvo su inicio con el combate de San Lorenzo. Más tarde se hizo cargo de la Jefatura del Ejército del Norte, en reemplazo del General Manuel Belgrano. En ese momento concibió su plan continental que consistía en lanzar una ofensiva contra las tropas realistas ya no desde el Alto Perú sino desde Chile, lo que implicaba cruzar los Andes con un ejército que aún debía conformarse para tal fin, y así llegar a Lima a través del mar. San Martín pidió ser nombrado intendente de Cuyo, con sede en la ciudad de Mendoza, para organizar y llevar adelante este plan que quedaría en la historia política y militar como uno de sus capítulos más originales.
Más de cinco mil soldados formaron parte del ejército que cruzó los Andes cuya conformación, iniciada en 1815, demandó enormes esfuerzos colectivos. En febrero de 1817, el plan se puso en marcha. Para ingresar a Santiago de Chile, San Martín apeló a distintas maniobras distractivas, como la de dividir sus tropas en seis frentes, dos de los cuales ingresaron a Santiago de Chile por el norte, otros dos por el centro (que fue por donde efectivamente ingresó) y finalmente dos por el sur (el lugar por donde los realistas creían que llegaría el Ejército de los Andes). Este avance por sorpresa permitió el triunfo en la cuenca de Chacabuco (febrero de 1817), a lo que le siguió una inesperada derrota en Cancha Rayada (marzo de 1818) y el triunfo patriota semanas después en la batalla de Maipú (abril de 1818).
A partir de allí, y con una flota organizada y financiada por Chile, se dirigió al centro del poder español en Sudamérica, la ciudad de Lima, donde tomó el control político de la ciudad y declaró la independencia del Perú en 1821. La carrera política y militar de San Martín se cerró en Guayaquil, en 1822, al entrevistarse con Simón Bolívar, a quien le cedió el mando de su ejército. Bolívar condujo las tropas que aseguraron definitivamente, en la batalla de Ayacucho (1824), la emancipación americana de la corona española.
“Juana Azurduy, una heroína popular”
San Martín fue una de las referencias más importantes de una revolución plural, que involucró a múltiples actores sociales -indios, mestizos, afrodescendientes, criollos- y que tuvo un alcance continental. Una revolución americana cuyas causas guardan relación con procesos que tuvieron epicentro en Europa (desde la influencia ideológica que ejerció en las elites locales la Revolución Francesa hasta acontecimientos fundamentales como la abdicación de Fernando VII en 1808 a partir del avance de las tropas napoleónicas), pero que se enraizaba en la historia de nuestros pueblos.
En efecto, los territorios de la región andina sudamericana fueron sede de varias insurrecciones populares que pueden ser consideradas como antecedentes de las luchas independentistas. En 1780, Tupac Amaru II y Micaela Bastidas lideraron una rebelión en la zona de Cuzco contra el orden colonial que fue acompañada por amplias bases sociales. En 1781, Tupac Qatari, de origen aymara, junto a Bartolina Sisa y Gregoria Apaza, sitiaron en dos ocasiones la ciudad de La Paz. Y entre 1777 y 1781, el aymara Tomás Qatari lideró una rebelión en la zona de Potosí, en la que reclamaba la recuperación de autonomía de los ayllus o comunidades. Al ser asesinado en 1781, su esposa Kurusa Yawi tomó la posta en la lucha y alcanzó a sitiar dos veces la ciudad de Chuquisaca. Todas estas rebeliones fueron cruelmente reprimidas por la corona española.
Aunque diversas, estas insurrecciones tuvieron muchos puntos en común: el expreso malestar contra el orden colonial, las amplias bases populares conducidas por indígenas que apoyaron estos movimientos y la importante participación de las mujeres no sólo en las luchas sino también en la dirección de estas rebeliones. La singular trayectoria de Juana Azurduy, protagonista central en las luchas por la independencia, se entiende mejor si se toman en cuenta el trasfondo de estas disputas.
De hecho, Juana Azurduy nació en el mismo momento en que surgían y eran ferozmente reprimidas esas rebeliones: un 12 de julio de 1780 en Toroca, una población ubicada en el norte de Potosí perteneciente al Virreinato del Río de la Plata (actualmente Bolivia). Fue hija de Eulalia Bermúdez, mestiza oriunda de Chuquisaca, y de Matías Azurduy, un hacendado de buena posición económica y con tierras en la región. Su padre le transmitió las destrezas relativas a las tareas rurales y fue en las haciendas de propiedad familiar donde conoció de cerca al campesinado indígena y aprendió los idiomas quechua y aymara.
Tempranamente sufrió la muerte de su madre y su padre, y debió completar su crianza primero con sus tíos y luego en el Monasterio de Santa Teresa de la Orden de las Carmelitas Descalzas, que abandonó a los 17 años. Ocho años después, en 1805, se casó con Manuel Ascencio Padilla, un estudiante de derecho que era hijo de unos vecinos y amigo de la familia. Tuvieron cinco hijos: Manuel, Mariano, Juliana, Mercedes y Luisa.
Tras la abdicación de Fernando VII, el pueblo de Chuquisaca formó la primera Junta de gobierno en el Alto Perú, un 25 de mayo de 1809. Tanto Padilla como Azurduy apoyaron la destitución del gobernador y se unieron a los ejércitos populares, que serían derrotados en 1810 por las tropas realistas. Con estos episodios, se reiniciaba el ciclo de insurrecciones andinas.
El matrimonio apoyó decididamente a la Revolución de Mayo (Padilla conocía a Moreno, Monteagudo y Castelli, quienes habían cursado sus estudios en abogacía en la Universidad de Chuquisaca). Prestaron sus haciendas para cobijar a parte de las tropas de la “Primera expedición auxiliadora del Alto Perú” liderada por Castelli en la que Padilla, además, se incorporó como suboficial. La derrota en la Batalla de Huaqui generó graves consecuencias entre los patriotas. En el repliegue, los realistas tomaron prisionera a Azurduy y a sus hijos. Padilla junto con otros soldados lograron liberarlos, pero a partir de este episodio Juana tomó una decisión que ya venía considerando: participar activamente en los combates.
Azurduy formó parte, en 1813, de la “Segunda expedición auxiliadora al Alto Perú”, esta vez al mando de Belgrano, con quien el matrimonio entabla una gran relación. Juana organizó una numerosa tropa compuesta por indígenas y mestizos que tuvieron una participación secundaria en la derrota de Vilcapugio. Entró en acción en la Batalla de Ayohuma, que se convirtió así en la primera de una larga serie de combates al mando del batallón denominado Los Leales.
Tras la derrota patriota en Ayohuma, el Alto Perú pasó a ser el escenario de combates que tenían, para los patriotas, objetivos predominantemente defensivos: contener y desgastar a las tropas realistas. Se crearon así las “Republiquetas”, nombre que designaba a milicias que tomaban por sorpresa al ejército español. Padilla y Azurduy estuvieron al mando de una de ellas, La Laguna, cuya acción se desplegó entre el norte de Chuquisaca y Santa Cruz. En este período, Azurduy conformó una guardia personal, “las Amazonas”, un grupo de 25 mujeres que pelearon a la par de ella.
Las victorias y derrotas se sucedieron; también las tragedias. En marzo de 1814, tras la derrota en Pomabamba, Azurduy tuvo que refugiarse en el Valle de Segura. En ese repliegue, sus hijos Mercedes, Juliana, Manuel y Mariano enfermaron de fiebre palúdica y disentería y murieron a los pocos días. En medio de ese enorme dolor, Juana Azurduy siguió peleando a lo largo de ese año, incluso estando embarazada de su quinta hija, Luisa, cuyo cuidado quedó a cargo de una indígena muy cercana, Anastasia Mamami.
En 1815, Padilla y Azurduy tomaron el control de la ciudad de Chuquisaca, pero las fallas en la conducción de José Rondeau, a cargo de la “Tercera expedición auxiliadora” al Alto Perú, permitieron que los realistas recuperaran este territorio. A partir de allí las luchas fueron aún más encarnizadas y es célebre la actuación de Azurduy en la batalla de Villar en marzo de 1816, que motivó que Belgrano solicite se la condecore para reconocer el “esfuerzo de su valor y de sus conocimientos en milicia poco comunes a las personas de su sexo”¹. Sin embargo, meses después Juana sufrió una herida en la batalla de La Laguna, y al intentar rescatarla, fue asesinado su esposo y compañero de luchas, Manuel Ascencio Padilla. Su cuerpo fue colgado por los realistas, junto con el de una de las amazonas, que los españoles creyeron que era el de Juana Azurduy.
En ese momento de profundo dolor, que además provocó una crisis en la guerrilla de La Laguna, Martín de Güemes acudió al pedido de ayuda de Juana Azurduy, primero con el envío de tropas al mando de Melchor Daza, luego asegurando el repliegue de Juana, que llegó a Salta en 1818. Se refugió en una propiedad de la familia de Güemes y se incorporó a su división de gauchos conocida como Los Infernales.
Tras el asesinato de Güemes, en 1821, es poco lo que se sabe de Juana Azurduy, excepto que tomó conocimiento del triunfo patriota en Ayacucho en Salta y que, en 1825, retornó a Chuquisaca. El 1 de abril de ese año, Simón Bolívar la ascendió a Coronel y le otorgó una pensión que recibió durante cinco años. Es conocida la entrevista que Bolívar y Sucre mantuvieron con Azurduy ese año, que será el eje de una película de notable factura de Jorge Sanjinés, Juana Azurduy, guerrillera de la Patria Grande (2016). Luego de la proclamación de la independencia de Bolivia, Juana intentó recuperar sus tierras, sin lograrlo, y murió en la miseria el 25 de mayo de 1862, a los 81 años, en la provincia argentina de Jujuy. Fue enterrada en una fosa común.
Sólo tardíamente serían reconocidas las luchas de Juana Azurduy por la emancipación americana. Cien años después de su muerte, sus restos fueron exhumados y trasladados a un mausoleo construido en la ciudad de Sucre, Bolivia. A partir de 2007, en Argentina se declaró el 12 de julio como el "Día de las Heroínas y Mártires de la Independencia de América", en conmemoración del nacimiento de la teniente coronel Juana Azurduy de Padilla. En 2009 fue ascendida post mortem como generala del Ejército Argentino y mariscal de la República Plurinacional de Bolivia. En marzo de 2010, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner entregó personalmente el sable y las insignias de generala ante sus restos, resguardados en la Casa de la Libertad en Sucre. Junto al presidente boliviano Evo Morales firmaron un tratado que instituyó el día del nacimiento de Juana Azurduy, como el “Día de la Confraternidad Argentina-Boliviana”.
Las historias de San Martín y Azurduy pueden pensarse como trayectorias simultáneas y solidarias dentro de un mismo movimiento regional. En el mismo momento en que San Martín abandonó las tropas españolas y comprendió que su destino revolucionario estaba en América, Juana Azurduy se sumó a las luchas por la independencia, reiniciando una larga y rica historia de rebeliones populares que tuvieron epicentro en el Alto Perú. De este modo, el carácter americano, mestizo, plural e igualitario de la revolución, que encontró en San Martín a una de sus referencias centrales, puede dimensionarse mejor a través de la historia de Juana Azurduy, cuyo recuerdo hace justicia también a la participación de las mujeres en nuestra historia. San Martín y Azurduy son, entonces, anverso y reverso de una gran epopeya: la emancipación forjada por los pueblos americanos.
¹ Margarucci, Ivanna: Mujeres Destacadas: Juana Azurduy de América, Museo Roca, Buenos Aires, 2015, p. 43
Sugerencias de actividades
Retratos de Juana Azurduy y José de San Martín
Compartimos retratos de Juana Azurduy y José de San Martín, en virtud de realizar las actividades propuestas para los distintos niveles educativos. Esta selección puede complementarse con otras fuentes que permitan pensar los distintos modos de abordar sus figuras:
Paulino Pinto, Casa de la Libertad, Sucre, Bolivia
Anónimo, Colección Museo Histórico Nacional, Argentina
Mario Miguez - Casa de la Libertad - Sucre – Bolivia
Daguerrotipo, Colección Museo Histórico Nacional, Argentina
Hernán Navarro, Casa de la Libertad, Sucre, Bolivia.
Carlos Sanz, Casa de la Libertad, Sucre, Bolivia
Anónimo - Salón de espejos de la Alcaldía de Padilla
José Gil de Castro, Colección Museo Histórico Nacional, Argentina
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Nivel Inicial
Cada 17 de agosto se recupera la figura de José de San Martín, protagonista de la gesta del Cruce de los Andes y referencia central en el proceso de las luchas por la independencia de las naciones sudamericanas a comienzos del siglo XIX. La propuesta que aquí se presenta para el nivel inicial busca abordar esta efeméride teniendo en cuenta, también, los amplios sectores que participaron en aquel proceso revolucionario. La historia de Juana Azurduy, con su condición de mujer y su vínculo con los pueblos originarios, permite comprender la multiplicidad de actores que protagonizaron la emancipación de la Patria Grande.
• Entre las imágenes que componen el afiche de este material se encuentra una en la que Juana Azurduy mira decididamente hacia adelante, apoyada sobre su sable. Se sugiere realizar una puesta en común con los niños y las niñas para recuperar esa representación y construir un diálogo con la ayuda de las letras de canciones de Mundo Zamba que aluden a Juana Azurduy en su calidad de lideresa: “Con un alma vencedora, tan feroz como un león”, “El español no pasará, con mujeres tendrá que pelear”, “Truena el cañón anunciando el fin, esta revolución viene oliendo a jazmín”. Algunas preguntas que pueden acompañar esta reflexión pueden ser: ¿por qué creen que Juana tiene allí un sable? ¿conocen otras mujeres en la historia a las que se relacione con la lucha por la libertad? ¿sólo los hombres participaban en los ejércitos revolucionarios? ¿qué lugares ocuparon las mujeres en ellos? ¿por qué consideran que la canción compara a Juana con la fiereza de un león o a la revolución con el olor a jazmín?
• La historia de Juana Azurduy permite también pensar el tema de la organización social, la participación pública y el rol de las mujeres en la época colonial, a quienes generalmente se le asignaban las tareas de cuidado y orden familiar en el interior del hogar. La biografía de Juana, sin embargo, representa un quiebre respecto de esos mandatos. Se sugiere conversar con las niñas y los niños sobre la vida cotidiana en aquellos tiempos y qué aspectos de la vida de Juana Azurduy desafiaron estos moldes. Pueden elegir conversar sobre su temprano vínculo con la población indígena mientras acompañaba a su padre en las faenas de la hacienda de propiedad familiar, el abandono del Monasterio de Santa Teresa de la Orden de las Carmelitas Descalzas o directamente de su papel protagónico en las luchas independentistas.
• Se propone conversar, también, acerca de cómo esta biografía permite cuestionar la idea de que la revolución fue una tarea exclusiva de varones. Puede complementarse la actividad a partir de la visualización del siguiente video producido por Paka Paka, que recrea la infancia de Juana Azurduy.
• Las diferentes imágenes con que hoy se representa a Juana Azurduy fueron realizadas luego de su fallecimiento. Compartimos aquí algunas de ellas para pensar con los niños y las niñas sobre los modos de recordarla y conocerla desde el presente: ¿qué elementos en común pueden encontrar en los diferentes cuadros? ¿por qué creen que en algunos ella está con uniforme y en otros no? ¿son parecidos estos cuadros a los de próceres o revolucionarios hombres que conocen? ¿en qué se diferencian unos de otros?. La actividad puede complementarse con la propia producción de retratos por parte de los niños y las niñas; ¿cómo dibujarían hoy a Juana Azurduy?
• La propuesta visual de este afiche incluye, junto con la imagen de Juana Azurduy, un retrato de San Martín, un mapa de las colonias, los pueblos y los territorios en Sudamérica hacia 1818. Se sugiere presentar a partir de ellos un relato que ponga en diálogo estos objetos, con el objetivo de construir una narración para que los niños y las niñas puedan comprender cómo se relacionan las historias de San Martín y Juana Azurduy, el Cruce de los Andes y la resistencia al avance de los realistas en el Alto Perú, evitando relatos simplificadores y aportando información en función de la edad de cada sala.
• Se incluye aquí, además, una imagen poco conocida de San Martín; se trata de un daguerrotipo tomado poco antes de su fallecimiento. A partir de ella, se sugiere indagar si los niños y las niñas ya lo conocían, y qué otras representaciones (monumentos, calles, cuadros en la escuela, nombre de instituciones públicas, localidades, billetes, etc) existen y conocen sobre el Libertador. Con la ayuda de las y los adultos de las familias se puede consultar la importancia de aquellos emplazamientos en lugares públicos en todo el país y las actividades que en ellos se realizan así como también las ocasiones y fechas en que suelen congregarse alrededor de los mismos.
Nivel Primario
Cada 17 de agosto se conmemora en las escuelas, el paso a la inmortalidad del general San Martín. Su figura está asociada a un hecho trascendental, el Cruce de los Andes, que fue el punto de partida de la consolidación de la independencia en lo que hoy es Argentina, Chile y Perú. Llevar adelante esta gesta demandó enormes esfuerzos colectivos. En este sentido, la lucha de las mujeres fue fundamental en la denominada Guerra Gaucha. Con este nombre se conoce a la lucha de milicias y guerrillas llevada adelante en el noroeste argentino contra los ejércitos realistas que avanzaban desde el Alto Perú durante las luchas de la independencia en el período comprendido entre 1814 y 1825. Las mujeres no solamente eran destacadas espías sino que algunas de ellas, como Juana Azurduy, comandaban tropas en las vanguardias de las fuerzas patriotas. También se destaca en estas guerrillas la participación y el protagonismo de pueblos indígenas, un sector fundamental de este sujeto colectivo que supo defender la soberanía popular y conquistar la independencia.
Para la realización de aquellas actividades que requieren una tarea de indagación e investigación, se sugiere seleccionar algunos de los recursos propuestos en la sección Materiales complementarios para orientar a los alumnos y las alumnas en sus búsquedas.
Primer ciclo
• Se propone que los alumnos y las alumnas investiguen cómo estaba integrado el Ejército de los Andes, teniendo en cuenta la procedencia social de los soldados, por ejemplo, la participación de las mujeres. También pueden indagar acerca de la vida de los habitantes de Cuyo en la época de las guerras por la independencia y cómo era la vida política y social de Mendoza antes del cruce: ¿quiénes fueron a la guerra y cómo se los reclutó? ¿cómo se prepararon? ¿por qué se necesitaba cruzar los Andes? ¿qué dificultades se debían afrontar en los diferentes lugares del virreinato para sostener la lucha por la independencia?
• Se sugiere que los alumnos y las alumnas lean “la carta” que envió San Martín a Buenos Aires con el fin de identificar las necesidades que requería el Ejército de los Andes para emprender el cruce ante el desafío que supone atravesar una geografía como la de la Cordillera de los Andes. También se busca proporcionar pistas acerca de las tensiones entre Buenos Aires, el Directorio quería que San Martín avanzara y sofocara a los caudillos, y el objetivo de San Martín que quería llevar adelante su proyecto continental. Este material es un relato ficcional pero verosímil, realizado en formato de periódico con fines didácticos.
CARTA DE SAN MARTÍN - Octubre 1816
Al gobierno de Buenos Aires
Tocamos ya la primavera y no me mandaron ni la mitad de las cosas que pedí.Me falta tiempo y dinero y no estoy bien de salud.
Entre el asma que no me deja respirar y los ataques de reuma que me tuvieron postrado en la cama durante 11 días, no sé con cual quedarme.
Ya sé cuál es el remedio para mis ataques tranquilidad.
Pero cómo voy a estar tranquilo si mis soldados no tienen ropa para ponerse ni frazadas para taparse en la intemperie. ¡Por Dios! mándenme los vestuarios para los granaderos que andan en cueros.
Otro elemento que necesito son clarines, sin ellos las prácticas de caballería son muy desordenadas porque los últimos de la fila no escuchan las órdenes.
No quiero molestarlo más con tanto pedido. Pero es que con soldados así no podremos ganar ninguna guerra.
Ellos se desaniman, las enfermedades los atacan y el frío de los Andes sin ropa adecuada es insoportable.
Hagan ustedes lo necesario para que sea rápido.
FUENTE: “Un hombre, un pueblo” en Diarios para chicos curiosos. Departamento de Educación Creativa ORT, Argentina, 1993.
• Se sugiere reflexionar en torno a las siguientes preguntas: ¿por qué San Martín diseñó el Plan Continental? ¿cómo lo llevó adelante? ¿qué problemas enfrentaron en el cruce de los Andes? ¿qué dificultades tuvieron que resolver antes de partir y cómo las fueron solucionando?
• Se propone que las alumnas y los alumnos observen con detenimiento el afiche y señalen qué aspectos les llaman la atención, si ya habían visto algunas imágenes similares y qué inquietudes o preguntas les genera. Luego, pueden continuar indagando acerca de: ¿qué relación tienen estas imágenes entre sí? ¿cómo se pueden articular? ¿qué representa la mujer que aparece en el afiche? Sugerimos que presten atención a la frase: “Liberar la Patria”: ¿qué les parece que quiere decir? ¿en qué los hace pensar? ¿quiénes y cómo contribuyeron a este hecho? Por último, podrían escribir un breve relato que vincule estas imágenes entre sí y su relación con la frase del afiche.
• Se propone que indaguen sobre el papel de Martín de Güemes y sus gauchos en la defensa de las fronteras del norte para impedir que los realistas avanzaran desde el Alto Perú: ¿cuáles eran sus estrategias? ¿participaron mujeres en estas guerrillas? ¿qué tareas realizaban?
• ¿Quién fue Juana Azurduy y cuál fue su participación en estas luchas? Las diferentes imágenes con que hoy se representa a Juana Azurduy fueron realizadas luego de su fallecimiento. Se presentan aquí algunas de ellas para pensar con las alumnas y los alumnos sobre los modos de recordarla y conocerla desde el presente. ¿Qué elementos en común pueden encontrar en los diferentes cuadros? ¿por qué creen que en algunos ella está con uniforme y en otros no? ¿son parecidos estos cuadros a los de próceres o revolucionarios hombres que conocen? ¿en qué se diferencian unos de otros? La actividad puede complementarse con una búsqueda propia por parte de los alumnos y las alumnas sobre otros retratos de Juana Azurduy para, luego, indagar cuáles son las situaciones en que aparece representada, con qué otros elementos se la representa y cómo se la recuerda. Se sugiere realizar un dibujo como un modo de imaginar diversas representaciones de la lideresa.
Segundo ciclo
• La guerra revolucionaria en América se inició simultáneamente a lo largo de todas la regiones de los dominios hispánicos a fines del siglo XVIII y principios del XIX. Las luchas se dieron como consecuencia de enfrentamientos entre la Corona y sus súbditos. La historia tradicional poco se ha dedicado a indagar sobre la participación de las mujeres en los ejércitos revolucionarios. Juana Azurduy de Padilla fue criolla y armó su ejército de amazonas en 1812 con mujeres mestizas e indígenas cuyos intereses económicos y sociales también estuvieron postergados y sometidos por la política realista. El accionar militar de Juana y su ideal de independencia la llevó a ocupar, junto a otras mujeres, lugares importantes en el proceso revolucionario "poco comunes para las de su sexo", según lo destacan las fuentes, porque cumplieron roles que en su época estaban asignados a los varones. Por lo general se subsume el colectivo de mujeres cuando se coloca a Juana como la única revolucionaria. Se creía natural que las mujeres no llevaran armas en el combate y que nunca vistieran ropa de hombre, por ello Juana invirtió los valores. El cuerpo de caballería creado por ella constaba de unas veinticinco mujeres amazonas que siempre aparecían como escolta en los ataques. Teniendo en cuenta este contexto, se propone que las y los estudiantes indaguen acerca de las acciones militares de este colectivo de mujeres que tuvo a Juana Azurduy como su líder y su importancia en las luchas contra los realistas en el Alto Perú. También podrían buscar imágenes en páginas web que consideren representativas de su accionar. ¿Cómo se representa a las mujeres amazonas? ¿en qué situaciones aparecen? ¿se las muestra en combates? ¿cómo son sus vestimentas? ¿portan armas?
• Hacia 1816 Juana Azurduy y su gente marcharon hacia el Sur para unirse a las fuerzas de Martín de Güemes. Tras la muerte del caudillo, permaneció en Salta y, desde allí, escribió en 1825 esta conmovedora y digna carta a las autoridades de la provincia:
“A las muy honorables Juntas Provinciales:
Doña Juana Azurduy, coronada con el grado de Teniente Coronel por el Supremo Poder Ejecutivo Nacional, emigrada de las provincias de Charcas, me presento y digo: Que para concitar la compasión de V.H. y llamar vuestra atención sobre mi deplorable y lastimera suerte, juzgo inútil recorrer mi historia en el curso de la Revolución […]. Aunque animada de noble orgullo tampoco recordaré haber empuñado la espada en defensa de tan justa causa [...]. La satisfacción de haber triunfado de los enemigos, más de una vez deshecho sus victoriosas y poderosas huestes, ha saciado mi ambición y compensado con usura mis fatigas; pero no puedo omitir el suplicar a V.H. se fije en que el origen de mis males y de la miseria en que fluctúo es mi ciega adhesión al sistema patrio […]. Después del fatal contraste en que perdí a mi marido y quedé sin los elementos necesarios para proseguir la guerra, renuncié a los indultos y a las generosas invitaciones con que se empeñó en atraerme el enemigo. Abandoné mi domicilio y me expuse a buscar mi sepulcro en país desconocido, sólo por no ser testigo de la humillación de mi patria, ya que mis esfuerzos no podían acudir a salvarla. En este estado he pasado más de ocho años, y los más de los días sin más alimento que la esperanza de restituirme a mi país […]. Desnuda de todo arbitrio, sin relaciones ni influjo, en esta ciudad no hallo medio de proporcionarme los útiles y viáticos precisos para restituirme a mi casa […]. Si V.H. no se conduele de la viuda de un ciudadano que murió en servicio de la causa mejor, y de una pobre mujer que, a pesar de su insuficiencia, trabajó con suceso en ella [...].”
• Juana, la máxima heroína de la independencia, murió a los ochenta y dos años un 25 de mayo, cuando el calendario recordaba ya lejanamente la fecha de las revoluciones de Chuquisaca y de Buenos Aires, totalmente olvidada en la más injusta pobreza. Se sugiere que los alumnos y las alumnas indaguen sobre la vida de Juana Azurduy, los lugares donde vivió antes, durante y después de las luchas por la independencia, los combates de los que participó y los honores que recibió en vida y luego de su muerte. ¿Por qué creen que a pesar de haber sido reconocida por sus contemporáneos, Belgrano y Simón Bolívar entre otros, vivió sus últimos años en condiciones de extrema necesidad? ¿por qué piensan que resulta necesario mantener presente su memoria y recuperar su aporte a la causa revolucionaria? ¿con qué ideales en la actualidad podemos vincular su legado? ¿qué significa asociar la idea de Nación a la idea de una Patria Grande libre, independiente y soberana?
• Juana Azurduy es considerada una “heroína” em las luchas por la independencia americana. Se sugiere que las alumnas y los alumnos busquen e investiguen otras historias poco conocidas de mujeres revolucionarias -tales como Remedios del Valles, Manuela Sáenz, María Magdalena Dámasa Güemes, entre otras- que hayan aportado a esta gesta y que gracias a ellas pudo construirse una Patria Grande libre y soberana. ¿Quiénes eran? ¿qué hacían? ¿qué ideales defendían y cuáles fueron sus aportes? ¿cómo son recordadas? Luego podrán elegir una de esas historias, buscar una imagen que la represente (fotografía, pintura, dibujo) y redactar un epígrafe que acompañe la imagen seleccionada.
Nivel Secundario
Las biografías de José de San Martín y de Juana Azurduy constituyen un capítulo destacado de la historia política latinoamericana. Al mismo tiempo, invitan a repensar algunos asuntos pendientes de nuestras “dolidas repúblicas”, al decir del escritor José Martí. Poner en relación ambas historias supone pensar a nuestros países a partir de itinerarios signados por problemas, pero también esperanzas comunes y colectivas. Para comprender mejor la revolución mestiza y americana que lideró José de San Martín, es necesario indagar trayectorias como la de Juana Azurduy. Como así también es necesario explorar la historia común de nuestros países sudamericanos, para abordar los desafíos del tiempo presente.
• En el cuerpo del afiche se mencionan un ciclo de insurrecciones que anteceden a las luchas por la independencia. Sugerimos que las y los estudiantes investiguen cuáles eran concretamente las demandas planteadas en esas rebeliones y en qué sentido pueden ser consideradas como antecedentes de las luchas contra la corona española que tuvieron como protagonistas a San Martín y a Juana Azurduy. También recomendamos que las y los estudiantes investiguen cómo son recordadas las figuras de Tupac Amaru II y Micaela Bastida en Perú, y las de Tupac Qatari, Bartolina Sisa, Gregoria Apaza, Tomás Qatari y Kurusa Yawi en Bolivia. Como corolario de esta investigación, proponemos que reflexionen sobre la presencia del pasado indígena en la construcción de la identidad nacional en países como Perú y Bolivia y la comparen con el caso argentino.
• En el afiche se argumenta que el nombre de Juana Azurduy da cuenta del carácter plural de las luchas por la emancipación americana, no sólo por su origen mestizo sino también porque a través de su historia puede observarse la participación de las mujeres en esas luchas. Proponemos a las y los estudiantes que, además de investigar la biografía de las mujeres nombradas en el afiche y en la actividad anterior, indaguen la historia de otras dos mujeres: Manuela Sáenz y María Magdalena Dámasa Güemes. ¿Qué puntos en común podrían trazarse entre estas mujeres y Juana Azurduy?
• En un material elaborado para el Museo Roca que recomendamos para las y los docentes, la historiadora Ivana Margarucci sostiene que en las imágenes pictóricas Juana Azurduy es retratada según tres tipos de representaciones: como “mujer varonil”, como “amazona” y como “santa”. Proponemos varias actividades alrededor de este punto. En primer lugar, indagar documentos históricos en los que Juana Azurduy aparezca representada en estos términos. Puede resultar útil, en este sentido, consultar el pedido de condecoración de Belgrano y la respuesta que obtiene donde se da lugar a ese pedido. En segundo lugar, buscar imágenes de Juana Azurduy para corroborar o matizar esta hipótesis (se incluyen algunas en este material). Se puede pedir, además, que las y los estudiantes elijan una de estas imágenes y realicen un análisis propio centrado en el modo en que allí aparece representada Juana Azurduy. Por último, sugerimos que debatan si con la formación de las nuevas repúblicas americanas se pusieron en cuestión, o se reforzaron, los estereotipos de género que eran parte de la vida colonial.
• Para continuar en el terreno de las intervenciones culturales y políticas, proponemos que las y los estudiantes analicen cómo aparece representada la figura de Juana Azurduy en: (a) el cancionero popular; (b) en películas centradas en narrativa histórica; (c) el capítulo dedicado a su figura en Las asombrosas aventuras de Zamba y (d) en el monumento construido en su homenaje y localizado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, hoy ubicado frente al Centro Cultural Kirchner. Luego de este relevamiento, sugerimos que puedan elegir alguna de estas intervenciones para reflexionar en qué contextos históricos, en qué términos y por qué razones se volvió significativa la figura de Juana Azurduy. Por último, sugerimos que las y los estudiantes pongan en relación, a partir de su análisis, cómo es recordada Juana Azurduy en Argentina y en Bolivia.
• Hacia fines del siglo XIX, el poeta y revolucionario cubano José Martí escribió un texto célebre para las letras latinoamericanas: Nuestra América. Proponemos a las y los estudiantes que lean un fragmento de este escrito, que incluimos a continuación, y que luego reflexionen, en base al afiche, cómo podrían pensarse las historias de San Martín y Juana Azurduy a la luz de la idea de Nuestra América.
Ya no podemos ser el pueblo de hojas, que vive en el aire, con la copa cargada de flor, restallando o zumbando, según la acaricie el capricho de la luz, o la tundan y talen las tempestades; ¡los árboles se han de poner en fila para que no pase el gigante de las siete leguas! Es la hora del recuento, y de la marcha unida, y hemos de andar en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes.
El buen gobernante en América no es el que sabe cómo se gobierna el alemán o el francés, sino el que sabe con qué elementos está hecho su país, y cómo puede ir guiándolos en junto, para llegar, por métodos e instituciones nacidas del país mismo, a aquel estado apetecible donde cada hombre se conoce y ejerce, y disfrutan todos de la abundancia que la Naturaleza puso para todos en el pueblo que fecundan con su trabajo y defienden con sus vidas. El gobierno ha de nacer del país. El espíritu del gobierno ha de ser el del país. La forma de gobierno ha de avenirse a la constitución propia del país. El gobierno no es más que el equilibrio de los elementos naturales del país.
José Martí, “Madre América” en: Obras Completas, La Habana, Editorial de Ciencias Sociales, p. 138.
• En base a estas reflexiones hechas a la luz de los escritos de Martí, se sugiere que las y los estudiantes puedan realizar una producción escrita (relato, poesía, artículo periodístico) o una representación gráfica (mural, nuevo afiche, collage) que pueda dar cuenta de estos vínculos en la historia de las revoluciones sudamericanas.
Para conversar en familia
Conversar en familia sobre esta fecha tan importante de la historia, como es el 17 de agosto, es una oportunidad para establecer un diálogo entre generaciones y reflexionar sobre la vida en común, las nociones de Patria, Identidad e Independencia. Los y las invitamos a acompañar a los niños, las niñas y los y las jóvenes en la realización de las actividades propuestas por nivel.
El pasado siempre se piensa en tiempo presente, por este motivo el abordaje de la historia argentina incorpora algunas preguntas y problemáticas que nos atraviesan en la actualidad como sociedad. A continuación, se proponen algunas actividades para mirar en familia y conversar sobre nuestra historia, incorporando una mirada de género.
• Para las más pequeñas y los más pequeños. En el presente material se incluyen diferentes reproducciones de imágenes de Juana Azurduy. Todas fueron realizadas luego de su fallecimiento. Se sugiere conversar con los niños y las niñas sobre los modos de recordarla y conocerla desde el presente. ¿Qué elementos en común pueden encontrar en los diferentes cuadros? ¿por qué creen que Juana Azurduy está en algunos con uniforme y en otros no? ¿son parecidos estos cuadros a los de otros próceres o revolucionarios hombres que conocen? ¿en qué se diferencian unos de otros?
• Se propone que los niños y las niñas busquen información sobre cómo estaba integrado el Ejército de los Andes, teniendo en cuenta la procedencia social de los soldados y la participación de las mujeres También pueden indagar sobre cómo era la vida de los habitantes de Cuyo en la época de las guerras por la independencia y cómo era la vida política y social de Mendoza antes del cruce. ¿Quiénes fueron a la guerra y cómo se los reclutó? ¿cómo se prepararon? ¿por qué se necesitaba cruzar los Andes? ¿qué dificultades se debían afrontar en los diferentes lugares del virreinato para sostener la lucha por la independencia?
• Se propone que las adultas y los adultos compartan su experiencia escolar en torno a la figura de José de San Martín. ¿Era recordado en las escuelas? ¿de qué modos? ¿conocieron a Juana Azurduy en sus trayectorias escolares? ¿se hablaba de ella en la escuela para esta u otras fechas?
• Para los y las más grandes. En el afiche se argumenta que el nombre de Juana Azurduy da cuenta del carácter plural de las luchas por la emancipación americana, no sólo por su origen mestizo sino también porque a través de su historia puede observarse la participación de las mujeres en esas luchas. Proponemos que las y los jóvenes puedan indagar la biografía de las mujeres nombradas en este material, para conversar en familia sobre su historia y pensar qué puntos en común pueden encontrar reflexionando, a la vez, sobre el rol que desempeñaron las mujeres.
• Se sugiere que las y los jóvenes puedan indagar sobre las diferentes representaciones de Juana Azurduy en el cancionero popular, en diversas películas, instituciones y en los monumentos de la vía pública. Luego de este relevamiento, se puede conversar en familia sobre estas intervenciones, para reflexionar en qué contextos históricos, en qué términos y por qué razones se volvió significativa la figura de Juana Azurduy.
• Se propone que los/as adulto/as compartan su experiencia escolar en torno a la figura de Juana Azurduy ¿Era recordada en sus escuelas? ¿conocieron a Juana Azurduy en sus trayectorias escolares? ¿se hacía referencia a ella en la escuela para esta u otras fechas? ¿se recordaba y homenajeaba a otras mujeres o se hacía referencia a ellas? ¿a quiénes y de qué modo?
Materiales complementarios para docentes
Compartimos algunos materiales para enriquecer y complementar esta propuesta exploratoria para pensar el proceso y las luchas por la independencia de la Patria Grande.
Educación Inicial / Primaria
Cuando era chico quería ser grande: Juana Azurduy - Canal Pakapaka
Anécdotas de la infancia de destacadas figuras que participaron en las luchas por la independencia de América Latina. Juana Azurduy, Artigas y Emiliano Zapata, entre otros.
Mundo Zamba CANCIÓN JUANA AZURDUY
Interpretada por Gladys "La Bomba Tucumana", Juana Azurduy, Flor del Alto Perú es una de tres canciones que forman parte del capítulo La Asombrosa Excursión de Zamba con Juana Azurduy.
La asombrosa excursión de Zamba con Juana Azurduy
Zamba viaja en el tiempo una vez más para conocer a la mismísima "Flor del Alto Perú", ¡Juana Azurduy! Una guerrera única que durante años luchó por la libertad junto a su esposo, Manuel Padilla.
La asombrosa excursión de Zamba en Yapeyú
Zamba recorre las campañas independentistas de San Martín. Lo mejor de Zamba en Yapeyú ¡en un solo capítulo!
Historias de papel - Juana Azurduy - Canal Encuentro
Una original reconstrucción, en papel, de importantes momentos de la historia enmarcados en la luchas populares de Argentina y Latinoamérica.
Bicentenario del cruce de los Andes
Secuencias integradas - Nivel Primario Dirección General de Escuelas, provincia de Mendoza.
Cuadernos 6 Seguimos Educando:
Esta colección ofrece recursos con el fin de brindar una oportunidad para mantenernos en contacto con la escuela, con los conocimientos, con la tarea y, sobre todo, con el aprendizaje.
Educación secundaria
Especial 25 de mayo “La madre de la Patria”:
Abordar la Revolución de Mayo desde una mirada de género. Un afiche, propuestas de actividades por nivel educativo y para conversar en familia, y materiales complementarios para volver a pensar nuestro pasado como nación. Este material forma parte de la colección «El género de la patria» una apuesta a conocer y reflexionar sobre la historia desde una nueva agenda de derechos, una oportunidad para profundizar el nexo entre efemérides y democracia.
Mujeres Destacadas- Juana Azurduy de América
Margrucci, Ivana; Historia Visual N° 35; Mujeres destacadas: Juana Azurduy de América, Museo Roca, Buenos Aires, 2015.
El Museo Roca e Instituto de Investigaciones Históricas, a través de su programa Historia Visual, publica el número 35 titulado Juana Azurduy de América. La investigación histórica y los textos estuvieron a cargo de la profesora Ivana Margarucci, colaboradora entusiasta de este organismo.
Especial: 17 de agosto. Educ.ar
En 2017 se celebra el Bicentenario del Cruce de los Andes y de la Gesta Libertadora Sanmartiniana, que constituye una muy buena oportunidad para reconstruir los hechos de la historia y, al mismo tiempo, revalorizar la acción de sus protagonistas.
17 de agosto, paso a la inmortalidad del General San Martín. Educ.ar
El 17 de agosto de 1850 falleció José Francisco de San Martín Matorras, conocido por todos como San Martín, una de las figuras más relevantes de la historia argentina y latinoamericana. Su actuación durante el primer tercio del siglo XIX en las luchas por la independencia en Sudamérica transformó su nombre en una referencia mundial de los procesos de descolonización.
Especiales Historia de un país Argentina siglo XX
Efemérides / Especial José de San Martín
Producciones especiales que rememoran fechas emblemáticas de la historia argentina del siglo XX. Algunas efemérides escolares que se abordan: 2 de abril, 25 de mayo, 9 de julio, 17 de agosto, 11 de septiembre, 12 de octubre, entre otras.