Reflexiones ambientales urbanas II
Materiales con información sobre el mosquito Aedes aegypti, transmisor de las enfermedades dengue, chikungunya y zika. Propuestas de actividades para el Nivel Secundario.
Creado: 19 enero, 2021 | Actualizado: 12 de junio, 2024
Un hogar para mis mosquitos o de cómo criaba mosquitos en casa sin saberlo
Si algo me molestaba, eran son estos mosquitos que me picaban en tobillos y las pantorrillas todas las tardes. Venían del patio, pasaban por debajo de la puerta y me picaban. Yo distraído no me daba cuenta hasta que me había rascado tanto que la pierna me sangraba (ok, confieso que tengo una enfermedad en la piel, nada grave). Muchas veces busqué dónde se criaban y eliminé sus criaderos, pero me seguían picando. Antes de comenzar una disputa vecinal busqué una vez más. No pude más que repetir los lugares donde ya había buscado un par de meses atrás para no dar nada por cierto. Debajo de una rejilla que tapa una de las bocas de drenaje de la lluvia en el parque me encontré con una sopa de larvas. Nunca vi nada así. A cinco metros de la puerta, muchos, muchísimos, demasiados mosquitos esperando crecer y picarme. Confieso que perdí el control, busqué cuanto producto químico tenía a mano y les eché. El agua se tornó blanca pero la sopa de larvas seguía bullente. Frustrado, me senté en el pasto rodeado de frascos. ¿Y si saco el agua y la tiro sobre pasto? Mmmm las pupas sobrevivirían y posiblemente llegarían a adultas... tuve que pensar más, hasta que di con la solución. Calenté agua hasta el hervor en la pava y la vertí hasta poner quietud en ese lugar. Faltaban dos cosas, la solución definitiva y saber cómo fue que pasó eso. Las dos respuestas vendrían de la mano. Al día siguiente llegó Juan, que corta el pasto y me ayuda con el mantenimiento de la casa, un gran tipo que se da maña para todo.
Le comenté el problema y me dijo: - ¿No te acordás que lo limpié?
Estaba lleno de mugre, la caja que tiene estaba llena de barro. Había incluso una cosa naranja horrible.
- ¿Y para qué sirve la caja?
- ¡Ah! no sé, preguntale al constructor que la hizo.
La caja no es más que una caja sin tapa por debajo del nivel del caño de drenaje con una capacidad de unos 4lts (o más) de agua. Su función no se sabe, posiblemente un error de cálculo de niveles, ni siquiera sabía de su existencia. Cuando Juan hizo limpieza sacó el hongo (que no era tan feo a mi parecer) y toda la tierra que en años había acarreado el agua desde el jardín hasta llenar completamente la caja. Juan dejó limpio para ser usado por los mosquitos un hogar de unos cuatro litros que se llenó de agua en la primera lluvia. Lugar ideal, reparado del sol, a estrenar, servicio de alimentos a domicilio... los mosquitos agarraron viaje enseguida. Así fue como construí un paraíso para ellos. Le pedí a Juan que pusiera unos cascotes, rellenara con cemento y anulara la caja de manera que no quedara nada de agua acumulada. Ahora tengo menos cicatrices en las piernas.
Dr. Hernán G. Solari
Depto. Física, FCEN-UBA
IFIBA-CONICET
Aedes aegypti en el taller mecánico
El mecánico de mi auto se queja por la cantidad de mosquitos que lo molestan en el taller. Su hijo de tres años es muy susceptible a las picaduras y está preocupado por el dengue. Mientras espero que termine de hablar por teléfono veo buena cantidad de estos insectos revoloteando. Capturo uno, a la luz del sol se ven las banditas blancas en las patas. En un ambiente muy urbanizado como este, suele tratarse de Aedes aegypti, el mosquito transmisor de la fiebre amarilla urbana, el dengue, el chikungunya, el zika y otros virus que enferman a las personas. Luego le pregunto si tenía recipientes con agua y mientras hago un paneo visual del taller y me responde que no tenía agua acumulada. Solo se ve una alcantarilla pluvial en la calle. Con la ayuda de un espejo y luz solar puedo constatar que no había larvas de mosquitos en el fondo.
–¿Estás seguro que no tenés agua acumulada en algún lugar?- le insistí.
Después de pensar unos instantes, me respondió –mmmm, la fosa-.
Fuimos al pozo donde suele instalarse el mecánico para reparar los vehículos desde abajo. El lugar se encontraba inundado con cinco centímetros de agua. Usaba unas tablas para poder pisar y no mojarse. Pudimos observar miles de larvitas alteradas por la luz de la linterna de medio centímetro de longitud.
-¿Y cómo llega el agua al pozo?- le pregunté.
- Es un problema general en el barrio, la napa de agua está cerca de la superficie y entonces filtra hacia la fosa- me respondió.
Pude observar que además había grasa, que sirve de alimento a organismos microscópicos (ej. bacterias, protozoos) presentes en el agua. A su vez estos microorganismos sirven de alimento a las larvas de los mosquitos. ¡Todo servido!
¿Qué puedo poner para matarlos? ¿Lavandina? ¿Cloro? ¿Insecticida? –me preguntó.
Por un instante pienso: “otra vez el paradigma químico”. El “qué le puedo poner”.
-Vos pasás mucho tiempo ahí. La lavandina y el cloro es para controlar a los microoganismos, pero la concentración que deberías usar sería tan alta que te intoxicarías o no soportarías el olor. Algo parecido te puede ocurrir si ponés algún insecticida. Hay soluciones más saludables y más efectivas a largo plazo- le respondí- .
Existen soluciones ambientales mucho más efectivas donde no se necesita aplicar productos químicos al ambiente. Por ejemplo en este caso, el problema es el filtrado desde la napa de agua. Se puede colocar una pequeña bomba de desagote y sacar periódicamente el agua hacia la alcantarilla de la calle. Sin agua en la fosa no habrá posibilidad que los mosquitos aprovechen la situación y se reproduzcan.
El mecánico llevó a la práctica la idea y funcionó muy bien. Quedó libre de mosquitos... pero se fue de vacaciones por quince días.
Nuevamente había muchos mosquitos en el taller.
Aedes aegypti es un mosquito oportunista, aprovecha cualquier ocasión para reproducirse. En este caso la solución es asegurar un bombeo periódico mediante un sistema automático.
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE-IEGEBA, FCEyN -UBA CONICET
Aedes aegypti en las Cubiertas de Vehículos descartadas
El interior de las cubiertas de vehículos usadas (tractores, camiones, automóviles, motos, bicicletas, etc.) son excelentes criaderos de Aedes aegypti. Constituyen ambientes ideales para su proliferación porque suelen mantener microambientes húmedos y acumulan pequeñas cantidades de agua ideales para el desarrollo del mosquito. A su vez, está protegida por una capa de aislante de los cambios bruscos de temperatura ambiente. Suele ser imposible sacar el agua remanente del interior de una cubierta, si no es mediante la ayuda de un trapo o un material absorbente. Se ha verificado la importación de huevos de este tipo de mosquito al continente Americano (Brasil y EEUU) en la década de los ´80 a través de mercaderías usadas dispuestas en contenedores a través de barcos provenientes de Asia. Para el año 2015 circulaban en Argentina más de 11 millones de vehículos. Un recambio de cubiertas vehiculares cada cuatro años sugiere la posibilidad de producir 11 millones de nuevos criaderos por año. Un reflejo del recambio y el desorden ambiental son las montañas de cubiertas frente a las gomerías de centros urbanos, o acumuladas en baldíos, desechadas en zanjas, etc. Existen municipios que presionan con multas a los comercios que mantienen cubiertas acumuladas en sus frentes, pero no les ofrecen soluciones alternativas. Existe un circuito comercial de cubiertas usadas entre centros urbanos y localidades periféricas que contribuye a dispersar pasivamente los huevos de Aedes aegypti desde una localidad a otra. De este modo, el mosquito se transforma en un souvenir entre la mercadería, viajando como huevo en el interior de las cubiertas que transportan los buques o las camionetas o camiones. Las cubiertas terminan su ciclo como basura capaz de acumular agua (criaderos) y su disposición final adecuada en rellenos sanitarios genera complicaciones debido a la elasticidad del material. Al presionarlo con las topadoras se entierran, pero con el tiempo vuelven a surgir a la superficie. De hecho, quienes monitorean la situación del Aedes aegypti en una región o necesitan material para sus estudios buscan los acúmulos de cubiertas usadas en zonas urbanas porque saben que allí encontrarán decenas de criaderos. El agua acumulada cuando se combina con detritos orgánicos también ofrece hábitat adecuado para la proliferación de otros mosquitos como Culex pipiens. La forma más adecuada de resolver este desorden ambiental es el reciclado donde un problema de alto riesgo puede transformarse en un negocio rentable. Existen empresas que se encargan de triturar las cubiertas y transformarlas en pellets, que son unas pequeñas bolitas de caucho que sirven de materia prima para la producción de otros materiales. Por ejemplo se usan como parte de mezclas para la producción de pisos que requieren elasticidad o el césped sintético. En la Argentina existen contadas empresas que reciben en forma gratuita las cubiertas. Fueron concebidas gracias a la participación de equipos multidisciplinarios organizados instituciones tecnológicas estatales, a la que se suman las propias empresas productoras y comercializadoras de cubiertas. Estos emprendimientos son alentadores y deberían ser acompañados regionalmente con el apoyo de legislaciones y decisiones gubernamentales estrictas que faciliten y aseguren la disposición final y tratamiento para el reciclaje de cubiertas en todo el país. Especialmente con apoyo económico para su creación en las provincias más afectadas. Se trata de una aberración ambiental la presencia de acúmulos de cubiertas en zonas urbanas porque ponen en riesgo la salud de los habitantes como las enfermedades transmitidas por mosquitos (dengue, zika y chikungunya y fiebre amarilla urbana). Estas enfermedades suelen surgir en forma explosiva, tal cual se está observando en la epidemia actual. Las declaraciones de emergencia del Estado son para destinar recursos para ese mismo fin. El poder Legislativo debería participar en considerar el tema del tratamiento final de las cubiertas de vehículos como uno de los factores de desorden ambiental que competen al estado y que ponen en riesgo la salud de los habitantes. Los distintos poderes ejecutivos (nacional, provincial, municipal) deberían considerar el efecto contaminante de las cubiertas en ambientes urbanos como una prioridad para resolver y producir acciones sustentables en el tiempo.
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Marina Stein
Área de Entomología
Instituto de Medicina Regional-UNNE - Resistencia-Chaco
Raquel M. Gleiser
Ecología de Artrópodos CREAN-IMBIV
CONICET-UNC – Córdoba
Aedes aegypti y la obsolescencia programada
El problema de las enfermedades trasmitidas por mosquitos urbanos como el Aedes aegypti presenta una gran complejidad. Hay muchas dimensiones por donde se puede abordar, tales como las culturales (donde la educación es la más importante), las ambientales y también las económicas. Para este último caso, se analiza la relación de las enfermedades transmitidas por vectores con el fenómeno generado por las empresas productoras de bienes. Desde la década del treinta, cuando por un objetivo de lucro económico se decidió acortar el tiempo de vida útil de los productos manufacturados (la denominada obsolescencia programada), quedó fuertemente afectada la conservación del medio ambiente. Se generan desde entonces importantes focos de contaminación del suelo, agua y aire. Los mosquitos no son la excepción porque pueden proliferar en los residuos sólidos capaces de acumular agua. El exceso de recipientes que acumula agua podría denominarse como una forma más de “contaminación productora de mosquitos” en las zonas urbanas. Vehículos, heladeras, lavarropas, cocinas, microondas, televisores, envases plásticos, entre otros objetos, son desarrollados y manufacturados con mayor eficiencia energética pero con menor vida útil. La regla del mercado es que con la compra del artículo, se establece su transferencia pero se alerta al comprador sobre la transferencia de responsabilidad sobre lo que ocurra después con dicho artículo. En muchos casos los objetos obsoletos son mantenidos sin sentido en algún lugar de la vivienda incluyendo el peridomicilio. Los objetos capaces de acumular agua en los domicilios constituyen el primer foco de proliferación de mosquitos. Siguiendo esa misma línea, los municipios tratan de resolver ese problema con el retiro de los restos domiciliarios para un posterior destino. Si bien existen iniciativas de reciclado, como la minería urbana, separación, trituración, fundición, re-manufacturación, etc., la promoción de un consumo creciente va mucho más rápido y los vertederos de productos inservibles están colapsando. Las soluciones al problema ambiental global deberían ser evaluadas desde el origen, donde las empresas productoras tendrían que demostrar su responsabilidad social y el Estado estimular estrategias para la recuperación, el reciclado y/o la transformación de los residuos en otros productos útiles. Por ejemplo, avanzar en la investigación y desarrollo de envases biodegradables. Los Estados, mediante su legislación, deberían considerar este tipo de problemas para asegurar un futuro saludable a las próximas generaciones. Es comprensible la necesidad de generar riquezas y de generar trabajo, pero en la actualidad estos aspectos contrastan fuertemente con la contaminación ambiental. Además, el problema no es exclusivo de la Argentina. Hoy por hoy, la transmisión continental de dengue, chikungunya, zika en América y el agregado de fiebre amarilla urbana en África son señales de que el problema de contaminación urbana capaz de provocar enfermedades transmitidas por vectores también es global. Todos compartimos el mismo problema. Estas señales ambientales traducidas en miles de enfermos deberían servirnos para re-pensar el planeta donde queremos vivir.
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Marina Stein
Área de Entomología
Instituto de Medicina RegionalUNNE - Resistencia-Chaco
Guillermo Folguera
Facultad de Filosofia y Letras
Fac. Ciencias Exactas y Naturales
UBA-CONICET
Raquel M. Gleiser
Ecología de Artrópodos CREAN-IMBIV
CONICET-UNC – Córdoba
El entorno donde pudo producirse un caso de dengue en 2016
Durante la primera semana de febrero de 2016 confirmaron dengue de tipo 1 a un jardinero de una institución. Esa persona pudo infectarse en el lugar de trabajo o en cualquier otro lugar. Fuera donde fuera el lugar de infección, el jardinero tenía el virus en la sangre, incluso antes de presentar síntomas y pudo transmitir el virus a hembras de estos mosquitos, tanto en el lugar de trabajo como en la manzana de donde vive. Como en la institución trabajan muchas personas, se tomaron las medidas preventivas que corresponde aplicar frente al caso de una persona infectada por dengue. Se tomó la precaución de suponer que hubiese sido allí. Se desalojó el predio, se realizaron tareas de fumigación para eliminar posibles mosquitos infectados, así evitar otras posibles picaduras infectivas. Luego, se buscaron posibles criaderos de Aedes aegypti que fueron hallados en tres ocasiones. Se puede concluir que la fumigación resolvió solo momentáneamente el problema. La fuente productora de mosquitos seguía intacta. Una analogía de esta situación podrían ser las imágenes de bomberos tratando de apagar el fuego para que el siniestro no se traslade a las casas vecinas. Sin los focos de proliferación de mosquitos, no hubiese sido necesario incorporar insecticidas al ambiente. Pero la historia no termina aquí. ¿Si el jardinero hubiese adquirido la infección en otro lugar? Entonces los mosquitos infectados de ese otro lugar son los que estarían transmitiendo. El domicilio del infectado se encontraba ordenado, no tenía recipientes con agua y cada tanto echaban agua hirviendo a las rejillas. Pero la casa vecina fue en otros tiempos una casa que estuvo “tomada” por mucho tiempo. Luego del desalojo, la entrada fue clausurada sin realizar tareas de ordenamiento y limpieza integral para evitar la proliferación de plagas. El jardinero se encontraba en reposo en una habitación con mosquiteros (y por las dudas pastilla repelentes). En las puertas de ingreso a la casa -que no tienen mosquitero–colocaron espirales del lado de afuera y aplicaron periódicamente insecticidas. Esas acciones sirvieron para que el infectado no transmitiera el virus a los mosquitos presentes en el lugar. Las elevadas abundancias de mosquitos sugieren la presencia de criaderos muy productivos en las inmediaciones. Este tipo de situaciones suelen darse también cuando se demuelen edificios durante el periodo estival que tienen sótano y se dejan así durante tiempos prolongados. Con las lluvias los sótanos se inundan y se transforman en excelentes criaderos de mosquitos inaccesibles para el humano. Los vecinos suelen sufrir las consecuencias. Cientos de mosquitos (en algunos casos miles) invaden los domicilios del entorno, entran por cualquier abertura o rendija de la casa y se transforman en una plaga molesta y peligrosa. Los vecinos sufren las consecuencias y quedan obligados a armar telas mosquiteras sobre las camas para dormir - como en las películas de aventuras por la selva- pero en realidad esta historia ocurrió en pleno centro de una gran ciudad. Los epidemiólogos tendrán que hacer sus investigaciones para determinar los verdaderos focos de transmisión y bloquearlos. Pero esta historia verídica debería servir de ejemplo para considerar el riesgo que generan las propiedades privadas abandonadas, de ingreso bloqueado o las demoliciones inadecuadas que se hacen inaccesibles para el control de plagas, poniendo en riesgo la salud de los habitantes. Entre las posibles soluciones ambientales saludables y económicas deberían establecerse normativas que se aseguren un ordenamiento y limpieza preventiva del predio antes de permitir el bloqueo de la entrada. Además debiera existir un registro de personas reales responsables del predio, a quien recurrir en caso de emergencia. Del mismo modo, para los edificios demolidos deberían tomarse los recaudos para prevenir la posibilidad de formación de criaderos de mosquitos.
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Leonor Bonan
Instituto de Investigaciones CeFIEC
FCEyN -UBA
Ing. Isaac Cymerman
Servicio de Higiene y Seguridad
FCEyN - UBA
El mejor control sobre Aedes aegypti
En esta historia pretendemos contar una excelente noticia y otra no tan buena. Empecemos por la segunda así quedará más resaltada la parte más favorable para el hombre. El mosquito Aedes aegypti es transmisor de un centenar de virus distintos (ej. fiebre amarilla urbana, dengue, chikungunya, zika, etc.) y se introdujo a partir de 1555 desde África a los puertos de todo el planeta desde buques de empresas que traficaban esclavos. Desde esos tiempos hasta la actualidad, Aedes aegypti logró adaptarse muy bien a los ambientes domiciliarios. Ha demostrado procesos de microevolución en tiempos muy cortos. Estos procesos se producen por mutaciones en intercambios genéticos durante la reproducción (meiosis) y fecundación entre las células sexuales de los progenitores. Es así que los procesos evolutivos se producen muy rápido entre los organismos que tienen tiempos generacionales cortos, como las bacterias (horas), los insectos (semanas) o mamíferos (años). La posibilidad de intercambiar genes en tiempos de semanas es lo que posibilita detectar lo que se denomina resistencia a los insecticidas. Los individuos más aptos entre las variantes genéticas de cada población de mosquitos son los que dejarán descendencia. Desde la ciencia, podemos asegurar que es casi imposible (la ciencia nunca dice nunca) que los mosquitos se adapten a la falta de agua que aprovechan sus formas inmaduras (larvas y pupas) para desarrollarse. Por eso, la mejor medida de prevención existente es eliminar el agua acumulada en los domicilios. Ahora viene la excelente noticia. Aedes aegypti es uno de los insectos del que existen mayor cantidad de publicaciones científicas en el planeta. La primera descripción corresponde a Linneo en 1762. Desde entonces existen muy pocos registros de que esta especie se encuentre en ambientes silvestres fuera de su región de origen en el noreste de África. Afortunadamente esta especie no suele aprovechar el agua de charcos formados por la lluvia o las crecidas de los ríos, los lagos, lagunas, arroyos, etc. Una excepción a la regla podría darse en el caso de llenado de recipientes por llenado de agua de ríos sin depredadores. La ciencia puede asegurar en forma categórica que por ahora no es común hallarlos en ambientes silvestres. La gran pregunta es ¿por qué no necesitó adaptarse totalmente a esos ambientes en los últimos 460 años de oportunidades? Es un buen tema para los futuros becarios. Existe bibliografía donde se demuestra que una de las razones es que las formas originales de África ponen sus huevos sobre las paredes de los huecos de árboles o en las hojas de plantas que acumulan agua. En el resto del mundo, los recipientes artificiales con agua asemejan esas características y por ello no pondrían sus huevos sobre la tierra. Pero tampoco se los suele hallar en cantidades en recipientes artificiales presentes en ambientes silvestres no tan alejados del hombre. Una posible respuesta se basa en la presencia de depredadores naturales como hormigas, coleópteros que comen huevos de pequeños insectos o depredadores que comen bichitos que se mueven (larvas de libélulas, larvas de insectos, aves, batracios adultos) en el agua. Las larvas de Aedes aegypti suelen viborear mucho frente a perturbaciones o a la presencia de depredadores. Otras especies de mosquitos se hacen las muertas frente a los depredadores. Lo que es evidente y hay que recalcar es que la propia naturaleza impide la colonización de ambientes naturales (o que Aedes aegypti no está presionando para ocupar dichos ambientes), con la misma intensidad que en los lugares habitados por el hombre. Una posible hipótesis es que tiene todo lo que necesita en el ambiente urbano (más que suficientes criaderos, muy buenos lugares para la reproducción, exceso de sangre para alimentarse y cada vez menos controladores naturales). Esta hipótesis quizás no sea cierta, pero al menos debería llevarnos a reflexionar sobre lo que estamos haciendo con la naturaleza y como nos relacionamos con el ambiente que nos toca habitar.
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Leonardo Horacio Walantus
Proyecto Vigilancia Epidemiológica.
Seguimiento de Criaderos de Mosquitos de Interés Sanitario
Centro de Investigaciones Entomológicas
Parque Tecnológico Misiones
Raquel M. Gleiser
Ecología de Artrópodos CREAN-IMBIV
CONICET-UNC – Córdoba
Reportaje entre especialistas: ¿qué podría suceder si tiro el contenido de un criadero por la pileta de la cocina?
Si el contenido de un criadero es tirado por la pileta de la cocina las larvas probablemente no sobrevivan, ya que, el lugar propicio para su crecimiento son aguas tranquilas - opina BSE.
- Si se lava con agua caliente (más detergente) probablemente algunas de las larvas mueran – agrega GR.
- Si la salida va a la cloaca y el sistema es cerrado la probabilidad de sobrevida de las que quedaron disminuye, finalmente en la planta de tratamiento quedarían muy pocas. Ahora si la pileta de la cocina va a un pozo ciego, lo más probable es que no quede ninguna que llegue hasta adulto, y si por el contrario, esa pileta desagua en un lugar abierto dependerá del tiempo de evaporación del agua, si es a una zanja dependerá de la presencia de depredadores –opina GR.
- He muestreado muchas zanjas en distintas provincias a lo largo de los últimos años. Nunca encontré Aedes aegypti. Pero sería factible hallarlos, en muy baja probabilidad, porque pueden provenir de desagües de casas, no los cloacales sino de piletas de lavar. Y claramente el ambiente zanja es más hostil que un recipiente en una casa.- sostiene NB
- Si el agua va por la cloaca al río, las larvas de Ae. aegypti no podrán sobrevivir porque serían alimento para los pequeños peces que se encuentran presentes cerca de las salidas de las cloacas –opina NS
- Si se tira el agua por la pileta, antes de llegar a otro destino esas larvas pasan a una rejilla que está debajo de la pileta, que tiene un sistema de sifón. Puede ocurrir entonces que las larvas queden en la rejilla y lo que habremos realizado es pasar las larvas desde el recipiente, a la pileta y luego a la rejilla y ahí seguirán con su vida en la propia casa- agrega NS.
- Lo más lógico es eliminar el criadero de otra forma, agua hirviendo es el más económico- opina GR., -O tirarlas a la tierra o al suelo al sol, si el suelo drena o está muy caliente no pueden sobrevivir-, concreta EBO.
BSE: Bertucci, Sabrina Eliana. Estudiante de Lic. en Biología, UNNE. Corrientes
EBO: Elena Beatriz Oscherov. Vicepresidenta de la Asociación Argentina de Parasitología.
GR: Gustavo Rossi, Taxónomo, Centro de Estudios de Parásitos y Vectores. CCT CONICETUNLP La Plata
NB: Nora Burroni. Grupo de Estudio de Mosquitos EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET, Buenos Aires
NS: Nicolás Schweigmann Grupo de Estudio de Mosquitos EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET, Buenos Aires
Aedes aegypti y el día del médico
El 3 de diciembre se celebra en toda América el día del médico según la propuesta de la Organización Panamericana de la Salud reunida en Dallas, 1953. Contrario a nuestras costumbres, el día celebra no el “paso a la inmortalidad” sino el nacimiento del médico cubano Carlos Finlay. Pero, ¿quién fue Carlos Finlay? ¿Por qué este homenaje?
Carlos Finlay es reconocido por haber descubierto que el mosquito Aedes aegypti era el transmisor de la temible fiebre amarilla. El homenaje es justo pero las cosas no son tan sencillas. Demos en tres pinceladas una brevísima historia del descubrimiento de Finlay.
La fiebre amarilla asolaba el continente Americano, desde Boston en el norte hasta Buenos Aires en el sur, de Lima a Rio de Janeiro se hacía sentir esta enfermedad muchas veces mortal. En 1853 la enfermedad llegó a Cumaná, Venezuela, una ciudad al borde de la selva y el Caribe. Fue puesto a cargo de la emergencia sanitaria el Dr. Louis Beauperthuy, médico y naturalista formado en Francia. Según las teorías de la época, la fiebre amarilla era debida a los miasmas que emanaban de los humedales que al entrar en contacto con las personas las enfermaban. Pero Beauperthuy vio que la teoría era incapaz de explicar sus observaciones. Beauperthuy observó que los pueblos originarios de la región hacían humo delante de las viviendas en pequeños braseros, medida efectiva para evitar las picaduras de insectos como los mosquitos. Mediante esta y otras observaciones sobre mosquitos utilizando un microscopio, llegó a la conclusión de que son los mosquitos y no los miasmas quienes transmiten la enfermedad y recomendó el uso de tules para protegerse. Llegó incluso a identificar a un mosquito “doméstico” con rayas blancas en las patas como uno de los vectores de la enfermedad. Si bien Beauperthuy comunicó su descubrimiento a la sociedad científica de su tiempo, el mismo fue descartado como extravagante, se oponía al consenso científico.
Sin saber de los descubrimientos de su colega, el médico cubano Carlos Finlay realizó estudios y experimentos sobre la transmisión de la fiebre amarilla con el mosquito que hoy llamamos Aedes aegypti y en su tiempo era conocido como Culex fasciatus. Finlay establece en investigaciones realizadas entre 1881 y 1886 que la fiebre amarilla era llevada de persona a persona por el mosquito. Su informe de 1886 en el American Journal of Medical Sciences corrió la misma suerte que el informe de su predecesor caribeño.
La fiebre amarilla y la malaria fueron responsables del fracaso del proyecto de canal en Panamá llevado adelante por los franceses. El proyecto fue retomado por Estados Unidos de Norteamérica (EEUU) y suspendido por igual causa.
Como consecuencia de la guerra hispano-estadounidense de 1898, Cuba fue ocupada por tropas de EEUU. Tropas que empezaron a sufrir los embates de la fiebre amarilla. A cargo del problema estuvo el mayor Walter Reed, médico, quien contaba con la asistencia de destacados médicos cubanos como el Dr. Agramonte. En una serie de experimentos, el grupo comandado por Reed pudo descartar la teoría de los miasmas, la teoría de los fomites y confirmar la teoría de Finlay. Finalmente el papel fundamental del mosquito como transmisor de la fiebre amarilla era reconocido. El saneamiento ambiental de los campamentos, evitando el desarrollo de las poblaciones de mosquitos permitió en los años siguientes continuar la obra del canal en Panamá y concluirlo en 1914.
Dejamos las muchas moralejas de la historia a los lectores, señalando solamente, que la cultura y el conocimiento de los seres humanos son elementos esenciales en la conformación del ambiente urbano.
Hernán G. Solari
Dpto. de Física, FCEN-UBA
IFIBA-CONICET
Tomás Orduna
Jefe de Servicio
Medicina Tropical/Medicina del Viajero
Hospital de Infecciosas F.J.Muñiz
Los mosquitos en el aprendizaje: Observación del ciclo de vida
El proceso de aprendizaje tiene más valor si se pueden provocar buenas preguntas que brindar buenas respuestas. Cuando hablamos de prácticas educativas relacionadas al entorno donde vivimos subyacen los conceptos de “ambiente”, “sustentabilidad” y “entorno saludable”. Es necesario definir conceptualmente sus fundamentos. En el caso de los mosquitos urbanos se trata de unidades ambientales conformadas por las manzanas que se encuentran contaminadas por criaderos de mosquitos y que pueden afectar la salud de los seres humanos y sus mascotas. Los mosquitos domiciliarios son insectos que habitan en las manzanas y en términos evolutivos fueron seleccionados por un proceso denominado “domiciliación” donde aprovechan los recursos –recipientes con agua para los sitios de cría, néctar vegetal como alimento, y fuentes de sangre como fuente de proteínas- y las condiciones más favorables (temperatura, humedad, etc) que brindan las viviendas y sus peridomicilios. Las hembras son el único estadio que constituye peligro para el ser humano, debido a la saliva inyectada al torrente sanguíneo durante las picaduras y la posibilidad de transmitir un patógeno. Los otros componentes del ciclo de vida de los mosquitos no constituyen riesgo vectorial para el ser humano y por eso es importante conocer y bloquear el ciclo de vida de estos insectos cuando se encuentran en esa etapa (no permitir que lleguen a adultos). Dependiendo de la especie de mosquito domiciliario que se trate, los huevos suelen ser puestos agrupados sobre el agua o sobre las paredes de los recipientes y las eclosiones pueden ser inducidas, y observadas por ayuda de una lupa. El seguimiento de larvas vivas en un simple frasco de vidrio con agua, sirve para ilustrar las estructuras anatómicas permitiendo explicar perfectamente como es su sistema respiratorio mediante tráqueas (sistema muy distinto al de los vertebrados) y el tipo de alimentación detritívoro gracias al movimiento de agua generado por parte de sus piezas bucales. El cambio de exoesqueleto en cada paso de su ciclo se puede ver a simple vista y filmar hasta con un celular. La diferencia con las pupas, que ya no se alimentan y su metamorfosis a adultos permiten experimentar y sirven para fijar en el conocimiento lo que es un fenómeno único de la naturaleza: “un ser vivo acuático se transforma en adulto volador”. Toda esta experiencia se puede realizar y seguir en un simple frasco de vidrio cerrado o una botella plástica transparente manteniendo dos terceras partes de aire en su interior. Después de pocos días, el final de la experiencia permite observar las características que diferencian a los machos (de antenas muy plumosas) que no pican y las hembras. Y así, con esta simple experiencia se puede demostrar categóricamente que esos insectos alados provinieron de formas larvarias acuáticas. Sea niño, joven o adulto, todo ser humano puede hacerlo y es recomendable que lo experimente. En la actualidad debemos reconocer que la mayoría de los adultos no ha visto y desconoce cómo son las larvas y/o el ciclo de vida de un mosquito. Es una experiencia económica, sencilla y que por sí sola nos ahorraría muchísimo tiempo de explicaciones relacionadas con las medidas preventivas más adecuadas. Nos ponemos a disposición de quien lo necesite (educadores o personas que quieran replicarlo) para asesorarlos a distancia para que puedan llevar esta y otras experiencias educativas que se enviarán en los próximos días. Existen dos videos recomendables que sirven para diferenciar al género Culex y Aedes aegypti (en youtube buscar como: Ciclo de vida del mosquito (#766) y Ciclo de vida Aedes Aegypti).
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Leonardo Horacio Walantus
Proyecto Vigilancia Epidemiológica.
Seguimiento de Criaderos de Mosquitos de Interés Sanitario
Centro de Investigaciones Entomológicas
Parque Tecnológico Misiones
Adrián Diaz
Laboratorio Arbovirus. Instituto de Virología “Dr. J. M. Vanella”. Universidad Nacional de Córdoba.
CONICET.
Los mosquitos en el aprendizaje: recolección y análisis de larvas y pupas de mosquitos
La educación ambiental permite promover el diálogo y reflexionar sobre el entorno donde vivimos y además fomentar cuáles podrían ser los cambios más saludables. Los domicilios donde vivimos comparten el ambiente con los vecinos en unidades llamadas manzanas. En este caso queremos compartir una experiencia que consideramos enriquecedora para llevar a cabo con las y los estudiantes en el aula y en el laboratorio. En una primera clase les mostramos en vivo y/o en imágenes fílmicas cómo es el aspecto general y cómo suelen moverse las larvas de los mosquitos. Luego las y los invitamos a que realicen una actividad práctica en sus propias viviendas, en la de familiares y/o en la de conocidos. De esta forma evitamos problemas de seguridad. En cada vivienda las alumnas y los alumnos recolectan información sobre los recipientes presentes. Cuantos recipientes hay, de qué tipo (balde, frascos, botella, etc.) si están con la boca hacia arriba y expuestos al llenado por lluvia o en forma artificial por riego. Además se registran los que tienen agua y se toman muestras de las que contienen larvas (o sea criaderos). Las larvas se colectan volcando el contenido de los criaderos (previamente filtrada) a una bandeja plástica ancha (como los envases de helados que se venden en los supermercados). El filtrado del criadero se logra mediante un colador plástico grande de cocina de malla fina y luego volcándolo a la bandeja (la caída del material se facilita golpeando el aro o el mango del colador sobre el borde de la bandeja). En caso que el criadero sea de gran tamaño se pueden capturar las larvas pasando el colador como si fuera una red para capturar peces por la parte mas superficial del recipiente. Si las larvas se van al fondo (típico de Aedes aegypti) hay que tener paciencia. Las larvas y pupas están obligadas a salir a la superficie porque toman el aire de la atmósfera mediante los sifones (en las larvas) o por trompetas respiratorias (en las pupas). El concentrado de larvas se vuelca con cuidado a un frasco con tapa, para luego llevarlo al laboratorio de la escuela. También se pueden usar pipetas plásticas, conocidas como pipetas Pasteur para recolectar las larvas individualmente. Se adquieren en farmacias por un precio económico. Las larvas del frasco se pueden mantener vivas (como para seguir el ciclo) o se pueden fijar con alcohol de farmacia en una relación de cuatro partes de alcohol y una de muestra. El conjunto de muestras e información que los alumnos llevan a la clase o laboratorio pueden servir para: a) determinar qué proporción de muestras eran de larvas con sifón corto (posible Aedes aegypti) y/o con sifón largo (posible Culex sp.); b) qué proporción de viviendas tenía criaderos de mosquitos; c) que proporción de los recipientes con agua eran criaderos; d) Que proporción de recipientes con agua eran criaderos que contenían larvas de sifón corto. Existen dos videos recomendables que sirven para diferenciar Aedes aegypti del género Culex (en youtube buscar como: Ciclo de vida Aedes Aegypti y Ciclo de vida del mosquito (#766) ). Hasta aquí los profesores de matemáticas estarán felices de que los alumnos puedan internalizar el concepto abstracto de una proporción. La profesora de geografía podrá explicar cómo se construye un mapa de riesgo si se ubican casas con criaderos en un mapa del barrio. Los alumnos y los padres (si son invitados) podrán reflexionar sobre el ambiente que viven y sobre qué medidas ambientales podrán aplicar para que sus hogares formen parte de un ambiente más saludable. Las propias redes sociales harán el resto. Promover el diálogo es promover el encuentro con el otro. Es desear escuchar, entender, comprender, preguntar, repreguntar, opinar; generar procesos de crecimiento y enriquecimiento a partir de los saberes compartidos. Nos ponemos a disposición de quien lo necesite (educadores o personas que quieran replicarlo) para asesorarlos a distancia para que puedan llevar esta u otras experiencias educativas que se enviarán en los próximos días.
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Leonardo Horacio Walantus
Proyecto Vigilancia Epidemiológica.
Seguimiento de Criaderos de Mosquitos de Interés Sanitario
Centro de Investigaciones Entomológicas
Parque Tecnológico Misiones
Adrián Diaz
Laboratorio Arbovirus. Instituto de Virología “Dr. J. M. Vanella”. Universidad Nacional de Córdoba.
CONICET.
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Los mosquitos en el aprendizaje: Trabajo docente y dengue
La problemática del dengue que nos ocupa y preocupa, con toda su complejidad, debe ser tomada como un reto para la creatividad, como una oportunidad de generar aportes desde el lugar en que nos toca estar. Uno de estos lugares claves, sin lugar a dudas, es el de los educadores. El trabajo docente como guía en el proceso del aprendizaje debe estimular el pensamiento reflexivo, investigador de los alumnos. El hecho de que hoy el tema esté instalado en los medios genera una circulación importante de información, opiniones y debates, lo que debe ser aprovechado como un disparador para esa mirada profunda, inquisitiva y mágica que desborda cuando el alumno se interesa por un tema.
Es también un momento oportuno para el trabajo multidisciplinario, transversal, en las aulas. Aquí se pondrá en juego la capacidad de que no solo los alumnos, sino los docentes interactúen.
Una simple consigna como la siguiente: ¿En qué lugares de nuestro país/el mundo se han registrado casos de dengue? ¿Existe algún patrón que explique esta distribución? ,puede necesitar del trabajo integrado del área de sociales, historia, geografía, naturales, informática, matemática (estadística) y en los establecimientos que posean un espacio curricular de expresión artística también podrían integrarse.
Los retos deberían ser:
- Trabajar sobre las fuentes de información para filtrar aquella confiable de la que no tiene consistencia científica.
- Generar contenidos que permitan a la comunidad educativa (alumnos, docentes, directivos, familia) abordar profundamente la problemática del dengue.
- Desarrollar espacios y herramientas de trabajo, que sean facilitadores en la difusión del conocimiento.
- Consolidar estrategias de aprendizaje que contribuyan a cambiar hábitos para mejorar nuestro entorno haciéndolo más saludable.
- Adquirir capacidades ligadas a los cuidados de la salud y el ambiente que contribuyan a mejorar nuestra calidad de vida.
Es importante que el alumno pueda experimentar, poner manos a la obra, ver con sus propios ojos lo que ocurre. Así también es necesario que sea consciente que es un actor principal y necesario para el cuidado de su salud, la de su familia y de la sociedad toda.
Para esto debemos ponerlo en contacto con los fenómenos biológicos que están ocurriendo en el patio de su casa. Generando experiencias en el laboratorio para conocer el material biológico con el que se está trabajando y exhibiendo cada instancia del ciclo de vida en una proyección audiovisual. Hay muchos recursos útiles para esto en la red que pueden ser aprovechados.
Cabe destacar que el docente deberá evitar fomentar la cría de Aedes aegypti en una situación de brote de dengue, pero puede valerse de otra especie de mosquito de características similares o trabajar en aspectos como ser la búsqueda de huevos en cacharros provenientes de las casas de los alumnos o el patio de la escuela, así como discutir sobre la mejor estrategia para eliminar tanto los huevos como el cacharro en cuestión. La toma de conciencia debe abordar principalmente el hecho de que cada postura que se asuma (acción o inacción), repercute no solo en la propia casa, sino en toda la sociedad. Nos ponemos a disposición de quien lo necesite (educadores o personas que quieran replicarlo) para asesorarlos a distancia para que puedan llevar esta u otras experiencias educativas que se enviarán en los próximos días.
Leonardo Horacio Walantus
Proyecto Vigilancia Epidemiológica.
Seguimiento de Criaderos de Mosquitos de Interés Sanitario
Centro de Investigaciones Entomológicas
Parque Tecnológico Misiones
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Corina Berón
Inst. de Inv. en Biodiversidad y Biotecnología
INBIOTEC - CONICET - Mar del Plata
Elena Beatriz Oscherov
Vicepresidenta de la Asociación Parasitológica Argentina (Ex Profesora Titular de Biología de los Artrópodos y Biología de los Parásitos)
FaCENA, UNNE Corrientes
Los mosquitos en el aprendizaje: Video en Youtube explicado por especialistas
Los videos sobre mosquitos que se muestran en las redes sociales son una excelente herramienta para el aprendizaje, sin embargo suelen carecer de buenas explicaciones. Muchos de ellos se filman en laboratorio, en peceras con escenografías que se parecen naturales. En el caso de este video se usan distintas especies y el conjunto de cuadros sirven para explicar sobre como es el ciclo de vida generalizado y características del comportamiento de algunos depredadores. Como se trata de experimentos de filmaciones en laboratorio, los actores (bichitos) no se responsabilizan de las interpretaciones que hagamos los humanos. Es importante señalar que a los mosquitos de la especie Aedes aegypti no se encuentran donde habitan esos depredadores en la naturaleza. En este caso pretendemos aportar información sobre detalles anatómicos, características comportamentales y alguna que otra moraleja relacionada al ambiente que nos toca vivir.
Iniciaremos con una explicación detallada, en base a lo que se ve en un video que seleccionamos en base a la increíble calidad de sus imágenes y que es accesible por internet. Se titula como: Ciclo de vida del mosquito (#766) . Este video no es de nuestra producción, solo se aprovecha su existencia previa. Por un buscador escribir: Youtube Ciclo de vida del mosquito (#766)
Ciclo de vida del mosquito (Este sitio puede consumir datos móviles)
Inicio: vista de una hembra perteneciente al género Culex parada sobre el agua y poniendo huevos (la tensión superficial hace que no se moje y hunda). Los huevos son pegados unos a otros formando lo que se llama balsa o navecilla, característico de los mosquitos del género Culex 0:17- En el texto del video es inexacto: el micro organismo que ocasiona malaria o paludismo en humanos es transmitido por mosquitos de otro género (Anopheles). Una balsa de Culex puede contener algo más de 200 huevos, pero para una segunda puesta la hembra necesita alimentarse con sangre, digerirla y preparar los huevos, esto le lleva tres o cuatro días después de alimentada. La balsa es inestable y si hay movimientos bruscos del agua (olas, o algo que cae y produce oleaje) puede volcarse y pasar a ser inservible. 2:02- Se observa como los huevos se oscurecen porque la cáscara se va endureciendo. Este fenómeno sucede en todos los huevos, independientemente del género de mosquito de que se trate. 2:55- La eclosión de los huevos de Culex a unos 25°C tardan menos de 48 hs (dice tres días, pero depende de la temperatura). 3:26- Se puede observar huevos sueltos de Aedinos sobre un papel de filtro (secante) o un paño, uno de ellos es el Aedes aegypti. Se muestra una larva de sifón corto (que funciona a modo de snorquel para tomar agua del aire de la atmósfera) y las antenas son más cortas que la longitud de la cabeza. 3:45- Parte de una balsa de huevos de Culex visto desde dentro del agua, por eso las larvas salen hacia arriba. 4:05- Se pueden ver las antenas de la larva tan largas como la longitud de la cabeza y el sifón bastante más largo que el visto anteriormente (retroceder a 3:28). 4:06 se ven bien las antenas y como la larva mueve los cepillos de las maxilas para mover el agua y alimentarse. 4:17- ninfa de libélula (alguacil, Odonato) y larva de Aedes. 4:18- en la larva que nada se ven bien las antenas más cortas que la cabeza. 4:22- cuando la libélula está comiendo se ve bien el sifón corto del mosquito. 4:25. la larva de mosquito nada como viboreando, es característico de las larvas de Aedes aegypti. 4:33- larvas de Aedes aegypti y la libélula. 4:35- se ve una larva de Aedes aegypti alimentándose de partículas o micoorganismos adheridas a la cutícula (exoesqueleto) de la libélula. 4:50- Se puede observar como la larva de libélula utiliza el labio adaptado para apresar como “mano” para capturar la larva de mosquito y se la come.4:54- la larva de libélula atrapa una pupa de Aedes. 5:12- una larva de escarabajo (posible Dytiscidae) atrapa una pupa de Aedes y la mastica. 5:17- larva de Aedes (antenas cortas) filtrando microorganismos o partículas en el fondo. 5:26- se puede observar el sifón corto y la “silla de montar “incompleta (esa cosa oscura debajo del sifón) que no rodea completamente el segmento. 5:27- se sabe que es Culex porque en el sifón se ven varios grupos de pelos (cerdas) desde arriba hacia abajo, el exoesqueleto es más grueso y oscuro en el sifón, la silla de montar y la cabeza 5:56- se ven los “cuernos” como dice el texto, en realidad a esas formaciones se las conoce como “trompetas respiratorias”, las que utiliza la pupa para quedar en contacto con el aire atmosférico y respirar. 6:02- a la izquierda se ve una de las trompetas como con una oquedad, que no es más que el lugar por donde entra el aire, su nombre es “Pinna”, la cual difiere en distintos géneros de mosquitos, Tiene forma de embudo muy ancho con respecto a la longitud total 6:10- Se puede ver a la pupa saliendo de la exuvia (esa piel es el exoesqueleto viejo del estadio anterior) de la larva de cuarto estadio. 6:16- Se observa la muda de la larva, la pupa ya salió “nadando”. 6:24- La pupa dará lugar al adulto a partir de las 48 hs en adelante, dependiendo de la temperatura y la especie. 6:31- obsérvese el movimiento de la pupa.6:39- Se puede ver una trompeta de un Culex, la pinna es apenas mayor que el diámetro de la trompeta que es casi tubular (recordar la anterior 6:02). 6:54- trompeta respiratoria con “pinna” alargada. 7:00- El adulto que se formó por metamorfosis en el interior y comienza a salir de la pupa. A este proceso se le llama “emergencia del adulto” y es por una ruptura del exoesqueleto en la parte superior de la pupa. El adulto sale sin tocar el agua 7:11- En el tórax del adulto se pueden observar las escamas blanquecinas y alargadas. 7:35 se observa como va saliendo el ala. 7:39: ya con la cabeza y el tórax afuera. 7:57- se ven saliendo las patas. 8:07- en este caso es la emergencia de un macho, se puede identificar por las antenas muy “peludas” aunque todavía no en posición final. 8:10- se puede observar la proboscis (pico de los mosquitos) y muy pegado a los costados los palpos con anillos blanquecinos. 8:12- patas anteriores libres, continúan las medias y las posteriores (8:15). 8:17- el mismo proceso de emerger del adulto visto desde el agua, en este caso una hembra (observar las antenas con pocos pelos –esto las diferencia de los machos). 8:30- La cabeza donde se ven los enormes ojos compuestos, y en el centro se insertan las antenas (poco peludas de hembra), y pegado a la proboscis los palpos cortos y con escamas claras en la punta. 8:34- aunque las patas tengan marcas blancas, el abdomen se nota que es redondeado en su extremo posterior, clásico de los Culex. Mientras la hembra se está endureciendo (secándose la cutícula del exoesqueleto (piel) aunque no esté mojada elimina por el exceso de agua de su organismo (8:37). 8:42- Este ejemplar es una hembra de Aedes aegypti, se puede ver en el tórax las líneas de escamas blancas que forman la clásica forma de lira, las escamas blancas que ocupan una buena porción de la pleura (la parte lateral del tórax), las marcas blancas en las patas y la punta de los palpos con escamas blancas (8:43). 8:49- un macho donde se ven todas las características que lo definen como Aedes aegypti. 8:55- Una pequeña araña depredadora de larvas y pupas de mosquitos. Recordar que observamos una larva de libélula (4:17, 4:22) y una de coleóptero (5:12) que también se alimentan de ellas. Estos tres ejemplos nos muestran cuan importantes son los otros artrópodos presentes en la naturaleza cuando se alimentan de otros bichos, entre los cuales también están los mosquitos. Las larvas de los Dytiscidos (conocidos como tigres del agua) son muy comunes en charcos profundos, zanjas o lagunas y se pueden encontrar muchos videos sobre su capacidad de depredar hasta renacuajos o pequeños peces (dependiendo de sus tamaños relativos (ej. poniendo en el buscador “Youtube Watertiger “. Estos depredadores artrópodos suelen encontrarse en ambientes silvestres y junto con otros (peces, aves, batracios adultos, etc.) contribuyen en que las poblaciones de mosquitos se mantengan controladas en la naturaleza. El ciclo de vida de los depredadores suele durar mucho tiempo, a veces meses o años para completarse (como en las formas inmaduras de las libélulas que viven en ambientes acuáticos permanentes) mientras que los mosquitos tienen ciclos de vida con tiempos de desarrollo muy corto. Por eso es que si se produce un desequilibrio que implica mortandad de los depredadores naturales (naturalmente o artificialmente por aplicación de insecticidas) los resultados pueden llegar a ser catastróficos. Los mosquitos suelen aprovechar todo el tiempo de ausencia de dep
redadores para reproducirse muchas veces, sus poblaciones crecen exponencialmente y se transforman en una plaga muy molesta o en los principales transmisores de enfermedades (generando epidemias). Este fenómeno es lo que explica porque los mosquitos se transforman en plagas insoportables en ambientes silvestres. La ausencia de depredadores naturales en las viviendas explica porque pueden transformar a los mosquitos domiciliarios en vectores causantes de epidemias. Nos ponemos a disposición de quien lo necesite (educadores o personas que quieran replicarlo) para asesorarlos a distancia y para que puedan llevar esta u otras experiencias educativas que se enviarán en los próximos días.
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Leonardo Horacio Walantus
Proyecto Vigilancia Epidemiológica.
Seguimiento de Criaderos de Mosquitos de Interés Sanitario
Centro de Investigaciones Entomológicas
Parque Tecnológico Misiones
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Elena Beatriz Oscherov
Vicepresidenta de la Asociación Parasitológica Argentina (Ex Profesora Titular de Biología de los Artrópodos y Biología de los Parásitos)
FaCENA, UNNE Corrientes
Los mosquitos en el aprendizaje: Un Video en Youtube recomendado para usar en el aula
El video que presentamos es muy didáctico y esta realizado por una institución muy seria. En este caso solo queremos complementarlo con información accesoria para el docente. Se lo puede buscar como “Ciclo de vida Aedes Aegypti” de 4:59 minutos de duración.
Ciclo de vida Aedes Aegypti (Este sitio puede consumir datos móviles)
Está compaginado con simulaciones graficas 3D de mosquitos y filmaciones. 0:27- simulación de adulto volando. 0:30- adultos posados sobre hojas (se alimentan de néctar vegetal y aprovechan la humedad de las plantas que necesitan para que su cuerpo no se deshidrate. 0:36- nuevamente simulación. 0:40- adulto emergiendo sobre el agua a partir de lo que era una pupa (el exoesqueleto se ve bajo el agua). 0:44- adulto sobre hoja. 0:48- simulación del apareamiento en el aire. Esta especie, como ocurre en muchos insectos alados suelen formar enjambres de apareamiento (conocido como “leks”) donde los de machos se agrupan (formando “nubes” de insectos), eso atrae a las hembras que eligen a su macho. El número de cópulas suele correlacionar positivamente con el número de mosquitos presentes y con la duración del enjambre. 0:58- simulación de hembra posada en la pared de una maceta plástica y en el acto de ovipostura a pocos milímetros del nivel de agua (que después contenida en un platito bajomaceta). Los huevos son inicialmente blancos (en unas horas se tornarán negros). 1:00- ambientes y recipientes ideales para la proliferación de esta especie de mosquito (desorden ambiental). 1:18- vuelve a la simulación de puesta de huevos. 1:25- la puesta de huevos es individual o de pequeños grupos. Esta especie tiene la estrategia de repartir en distintos recipientes al conjunto de huevos da cada ovipostura. Por lo que da más probabilidades de asegurar su descendencia. El recipiente menos perturbado por el hombre será el más exitoso para esta especie.1:48 Simulación del cambio de color de los huevos. 1:52- los huevos que se encontraban sobre el nivel del agua quedaran sumergidos por efecto de la lluvia o por llenado artificial. En este caso los huevos parecen blancos o grisáceos (quizás por efecto del reflejo). Pero para encontrarse maduros suelen ser de color negro. Así como se ve en 1:58 cuando quedan sumergidos. Aspecto típico de los huevos. Como un grano de arroz negro de aproximadamente medio milímetro de longitud. 2:00- Eclosión del huevo, sale la larva 1 (primer estadio larval, entre cuatro). 2:07- conjuntos de huevos, algunos eclosionando y larvas 1. 2:10- larvas en su posición típica bajo la superficie del agua. En la parte superior, el sifón tomando aire de la atmósfera y en la parte inferior la cabeza.2:18 Se pueden observar los movimientos de las maxilas para filtrar microorganismos del agua (su alimento). 2:22- movimientos característicos de las larvas de Aedes aegypti. 2:35- estadios de pupa. Las pupas más oscuras son las que han tenido más tiempo en cuanto a la maduración en el proceso de metamorfosis (transformación a adulto en su interior). Para poder completar este proceso las pupas no se alimentan. 2:34- cuando la pupa madura estira el abdomen (de forma de cómo pasa a ubicar su cuerpo en posición horizontal) es que esta por emerger el adulto (este proceso esta acelerado en el video, dura más de una hora). Por contracciones musculares y presión de la linfa (sangre de los insectos) se produce una ruptura longitudinal en la parte superior del cefalotórax (que queda en la parte que está en contacto con la atmósfera). 2:53- emergencia del adulto vista desde arriba de la superficie del agua. Se puede observar las escamas en forma de lira característica de la especie (Aedes aegypti). Durante la emergencia los nuevos adultos pueden morir si quedan pegados al exoesqueleto de la pupa. 3:06- El adulto recién emergido se encontraba comprimido, requiere de incorporar aire (se infla) para tener su forma natural y necesita de un tiempo para endurecer su exoesqueleto. Luego de un tiempo se aparea y recién después de apareada la hembra necesitará sangre para la producción de huevos. 3:17- nuevamente la simulación de un adulto en vuelo. 3:23- hallazgo de la fuente de sangre. Esta especie necesita ver a su fuente de sangre. Y es atraído por el calor producido por las venas, el dióxido de carbono que emitimos con la respiración y el ácido láctico que liberamos con la transpiración. 3:24- el aparato bucal picador tiene sensores especiales para llegar directamente a la vena. 3:26- para llegar a picarnos nos necesita ver, puede ocurrir que nos pique con luz artificial de noche. Esta característica los diferencia de otras especies como Culex pipiens que puede volar en oscuridad y detectarnos por el calor que emitimos, el acido láctico de nuestra transpiración y el CO2 que emitimos por la respiración. 3:48- Excelente explicación de cómo es la infección y la transmisión.
Gustavo C. Rossi
Centro de Estudios de Parásitos y Vectores
CCT La Plata-CONICET-UNLP
Nicolás Schweigmann
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET
Como es la Interacción de virus transmitidos por mosquitos y el sistema inmune de los vertebrados
Entre los arbovirus hay diferentes géneros, familias y órdenes. Como ejemplo: Dengue, St. Louis encephalitis (SLEV), Fiebre amarilla, West Nile (WNV) y Zika pertenecen al género Flavivirus (Familia Flaviviridae), por otro lado Chikungunya pertenece al género Alphavirus (Familia Togaviridae misma familia a la que pertenece el virus Rubéola), y mismo género al que pertenecen las encefalitis equinas. Cuanto más cercana su relación filogenética mayor cercanía en la constitución antigénica (comparten proteínas similares), como es de esperar los flavivirus entre sí van a ser más parecidos que con los alphavirus. Esto, a nivel de respuesta inmune, se puede traducir en una protección cruzada frente a la infección por más de un virus relacionado. Volviendo a los ejemplos: se ha visto que aves previamente inoculadas con West Nile (que ya tienen anticuerpos contra este virus en sangre) generan viremias mas bajas cuando se las inocula luego con el virus St. Louis encephalitis (comparadas con aquellas del grupo control). Esto indica que anticuerpos para WNV protegerían para SLEV.
Que pasa en humanos? En Dengue, existe protección cruzada entre los 4 serotipos durante los primeros meses (aumento de la respuesta inmune heteróloga -que reacciona y protege contra todos los serotipos-), luego de un tiempo esa respuesta se vuelve específica (homóloga) y sólo protegerá a infectados previamente con el mismo serotipo. Si se infecta con otro serotipo, el virus puede replicar en el organismo y enfermarse, y en algunas ocasiones generar un cuadro de dengue grave. De lo dicho se desprende que uno puede infectarse y enfermarse de dengue y a la vez infectarse y enfermarse de Chikungunya. Estamos hablando de dos especies virales y géneros virales diferentes. Un humano se puede infectar y enfermar con Dengue y Zika pero se desconocen las interacciones que pueden existir. Como ejemplo podemos mencionar el escenario que se vive en el estado de Bahia, donde existe la circulación simultánea de los 3 virus (Dengue, Chikungunya y Zika) vectorizados por Aedes aegypti. Esta situación no sólo complica el estado sanitario de la población sino también el análisis diagnóstico de los cuadros febriles. Estamos en presencia de un virus que no se conoce y estamos descubriendo su potencial epidémico y patogénico en estos días.
Dr. Luis Adrián Diaz.
Investigador Adjunto CONICET Laboratorio de Arbovirus y Arenavirus. Instituto de Virología "Dr. J. M. Vanella" Facultad Ciencias Médicas - Universidad Nacional de Córdoba. Instituto de Investigaciones Biológica y Tecnológicas CONICET-Universidad Nacional de Córdoba
¿Pueden los mosquitos o los vertebrados infectarse por más de un arbovirus?
Es posible que un mosquito y un vertebrado se infecten por más de un virus. Que tan probable? no lo sabemos. Se han encontrado mosquitos que pueden transmitir más de un virus a la vez pero las probabilidades son realmente bajas y no hay trabajos científicos que hayan podido cuantificar esa probabilidad. En experimentos en laboratorio se han inoculado mosquitos con dos flavivirus diferentes (encefalitis de Saint Louis: SLEV y encefalitis del Nilo del Oeste: WNV). Si bien hay transmisión de ambos virus, también existen interacciones. La infección con WNV disminuye la transmisión de SLEV, pero las evidencias son muy pocas por lo que se debería continuar con este tipo de experimentos para obtener conclusiones más fuertes. Los aislamientos virales desde mosquitos se realizan a partir macerados de mosquitos que son inoculados a un cultivo celular (por lo general, por una cuestión de costos, se trabaja con grupos de mosquitos y casi nunca con mosquitos individuales). Lo que suele obtenerse es la población del virus dominante, o sea la que mejor replicó y se adaptó al cultivo de células que se le ofrecen. Luego por medio de técnicas de secuenciación molecular se puede identificar si se trata de una sola especie viral o más de una. En los vertebrados como en los mosquitos los virus compiten por las proteínas que funcionan como receptores presentes en las membranas celulares. Se desconoce puntualmente el receptor particular para cada virus, por lo general hay familias de proteínas que funcionan como receptores para más de una especie viral. Para Dengue (también flavivirus) se cree que es una proteína tipo lectina. Pero los receptores cambian con el tipo celular. También hay otras familias de proteínas que pueden actuar como receptores. Los arbovirus suelen ser virus generalistas que pueden amplificar en una amplia variedad de tipos celulares. En el momento de ingresar suelen elegir como blanco a las células dendríticas (que actúan como células presentadoras de antígeno, son las primeras en activar el sistema inmune para dar respuesta a la infección), en donde replican y de ahí se dispersan al resto del organismo. En laboratorio se observa un efecto de interferencia cuando a un cultivo celular se inoculan muchos virus (hay tantos virus que no logran replicar en las células). No se cree que pueda suceder en un organismo vertebrado o invertebrado con la pequeña carga viral que puede inocular un mosquito y la cantidad de recurso celular a disposición. Es decir, es poco probable que las células se conviertan en un recurso limitante para la replicación viral en un modelo de transmisión viral como el de los arbovirus.
Dr. Luis Adrián Diaz.
Investigador Adjunto CONICET Laboratorio de Arbovirus y Arenavirus. Instituto de Virología "Dr. J. M. Vanella" Facultad Ciencias Médicas - Universidad Nacional de Córdoba. Instituto de Investigaciones Biológica y Tecnológicas CONICET-Universidad Nacional de Córdoba
¿Puede un mismo virus utilizar mosquitos de especies diferentes y en diferentes lugares?
La gran mayoría de los virus transmitidos por mosquitos son virus de ARN y eso les brinda una capacidad adaptativa increíble, permitiendo adaptarse a nuevas configuraciones de vectores y hospedadores de acuerdo a sus necesidades. Por ejemplo, en los EEUU el virus Encefalitis Equina del Oeste es transmitido por mosquitos Culex tarsalis, mientras que en Argentina el principal vector es Ochlerotatus. albifasciatus (mosquito que cría en charcos). Este cambio en el vector genera cambios importantes en la epidemiología y en los patrones de actividad del virus ya que el comportamiento y biología de estos vectores son diferentes. Culex tarsalis es un mosquito que cría en ambientes rurales con canales de irrigación y con preferencia de alimentarse de aves, mientras que Ochlerotatus albifasciatus es un mosquito de inundación de charcos temporarios, con tolerancia al frío y a la salinidad del agua, y prefiere alimentarse sobre mamíferos. Estas diferencias biológicas son claves a la hora de definir el patrón de actividad de un arbovirus.
¿Podría el virus Chikungunya, siendo un Alphavirus al igual que el virus Encefalitis Equina del Oeste, ser transmitido por Ochlerotatus albifasciatus?
Para responder esto hay que hacer los ensayos... no hay modelo predictivo para esto. Básicamente, como mencionamos anteriormente, los arbovirus (como todos los virus ARN) son muy plásticos a la hora de adaptarse y sobrevivir en un nuevo ambiente con fauna de vectores y hospedadores diferentes. La competencia de un mosquito o de un vertebrado para ser vector y hospedador, respectivamente, está determinada genéticamente y esa carga genética varía entre poblaciones de diferentes sitios, esto es uno de los factores que determinan que no se pueda preveer que vector y hospedador puede elegir un arbovirus cuando se introduce en un nuevo sitio geográfico.
Desde que el virus ingresa y sale a través de la saliva del mosquito, hay varias barreras de infección y replicación: una barrera de infección de la mucosa intestinal, barrera de escape desde el epitelio intestinal hacia todo el organismo del mosquito, dispersión por la hemolinfa y por último la barrera de infección y replicación de las glándulas salivales. Todas estas son barreras q determinan si un mosquito puede vectorizar un virus determinado.
Dr. Luis Adrián Diaz.
Investigador Adjunto CONICET Laboratorio de Arbovirus y Arenavirus. Instituto de Virología "Dr. J. M. Vanella" Facultad Ciencias Médicas - Universidad Nacional de Córdoba. Instituto de Investigaciones Biológica y Tecnológicas CONICET-Universidad Nacional de Córdoba
Reportaje entre Especialistas: ¿Aedes aegypti se encuentra en las zanjas?
-Aedes aegypti no se encuentra en las zanjas - afirmó BSE.
- He muestreado muchas zanjas en distintas provincias a lo largo de los últimos años. Nunca encontré Aedes aegypti. Pero sería factible hallarlos, en muy baja probabilidad, porque pueden provenir de desagües de casas, no los cloacales sino de piletas de lavar. Claramente el ambiente zanja es más hostil para esta especie que un recipiente en una casa - sostiene NB.
- En muestreos que realizamos en canaletas y zanjas de Córdoba hace unos años encontramos algunas larvas de Aedes aegypti, pero sospechamos fuertemente (no podemos descartar) que llegaron allí procedentes de recipientes de descarte que abundaban en la zona- replica RG.
- Hay una referencia antigua de un lugar en África donde hacían prevención volcando los toneles (en esos tiempos eran toneles) en las zanjas. Los investigadores encontraron larvas por lo cual las formas inmaduras de Aedes aegypti continuarán su ciclo de vida en las zanjas. Pero esto ocurre solo si se las vuelca a esos ambientes. Es importante recomendar que no se tire el agua de los criaderos en las zanjas. El agua de los criaderos con las larvas conviene tirarlas sobre el pavimento, sobre la tierra seca y al sol. Porque, por otro lado, si hay pupas en el criadero y se tira el agua en un suelo muy húmedo permitirá que las pupas emerjan a adultos- agregó NS
. -Muy difícil, el mosquito no elige esos lugares. En la mayoría de las zanjas suele haber depredadores que casi seguro no están presentes en los recipientes artificiales – opinó GR .
-Por otra parte, hay que aclarar que las zanjas producen mosquitos de otras especies, como Culex pipiens, y en grandes cantidades cuando hay materia orgánica. Una solución ambiental es ponerles pequeños peces larvífagos autóctonos (por ejemplo en Buenos Aires conocidos como madrecitas, en La Plata como panzuditos)- aclaró NS.
- la zona donde nosotros trabajamos, nunca hemos detectado estados inmaduros de Aedes aegypti en zanjas, solo pudimos identificar ejemplares del complejo Culex pipiens luego de muestreos semanales realizados durante tres años en la zona del gran La Plata y Berisso. Otra cuestión puede ser el tema de zanjas de escurrimiento o drenaje de campos inundados en donde es frecuente hallar ejemplares de Ochlerotatus albifasciastus, el muy conocido mosquito silvestre de inundación, junto a otras especies de mosquitos silvestres (especies de Culex y Psorophora) pero nunca recolectamos ejemplares de Aedes aegypti en esos sitios- Aseguró MVM.
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BSE: Bertucci, Sabrina Eliana, Estudiante de Lic. en Biología, UNNE. Corrientes GR: Gustavo Rossi, Taxónomo, Centro de Estudios de Parásitos y Vectores. CCT CONICET-UNLP La Plata
NB: Nora Burroni, Ecóloga del Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET, Buenos Aires.
RG: Raquel M. Gleiser, Ecología de Artrópodos CREAN-IMBIV, CONICET-UNC – Córdoba
NS: Nicolás Schweigmann, Ecólogo del Grupo de Estudio de Mosquitos EGE - IEGEBA, FCEyN-UBA CONICET, Buenos Aires
MVM: María Victoria Micieli, Patóloga especializada en Mosquitos del CEPAVE. Centro de Estudios Parasitológicos y de Vectores (CONICET-UNLP) La Plata.
Aedes aegypti y grandes espacios verdes: ¿¿¡Fumigar la reserva!??
Desde la última epidemia de dengue (2009) en Argentina, hablamos de gran epidemia, no sólo por el número de casos, sino tal vez porque tocó las puertas en la ciudad de Buenos Aires, con 7 casos autóctonos confirmados por el Servicio de Zoonosis del Hospital Francisco J. Muñiz. Desde ese entonces la población ha quedado con una memoria emotiva sobre la presencia latente del virus y la enfermedad (y de la posibilidad ocurrencia de un brote epidémico). Es decir, que ya no era una cosa de libros de historia. Lamentablemente, no ha ocurrido lo mismo con unos de los factores o componentes importantes del problema: el mosquito Aedes aegypti. Tal vez, por la desinformación o el mal uso de la información no quedó en la memoria lo relacionado a los hábitos y a los conocimientos necesarios sobre la biología de esta especie.
Tres años más tarde de ese brote epidémico de dengue, en el partido de Morón, zona oeste del conurbano bonaerense, se inauguró la Reserva Natural Urbana (junio de 2012). Un espacio verde cedido por la Fuerza Aérea de Morón, que actualmente consta de unas 14 hectáreas. El paisaje se encuentra conformado por pastizales, un bosque de especies exóticas y comunidades nativas, una reserva de agua, senderos para transitar y un parque recreativo. Para los que gustan de la naturaleza, nada más lindo que sentarse a tomar unos mates mientras baja el sol.
El año 2012 fue particularmente lluvioso en los meses de invierno, extendiéndose las precipitaciones hacia la primavera. Esta característica climática suele favorecer la presencia de una especie de mosquito característica de la región, que cría en charcos temporales de lluvia y en especial en pastizales, se trata de Ochlerotatus albifasciatus o mosquito de inundación. Este mosquito tiene la particularidad de estar adaptado a las bajas temperaturas, inclusive de invierno, y de allí que su distribución se extiende hasta Tierra del Fuego. Por lo tanto, no era necesario que llegara el verano para comenzar a sentir su presencia hacia fines del invierno y principios de la primavera.
La inauguración de la reserva coincidió con una temporada lluviosa y las picaduras muy molestas de Ochlerotatus albifasciatus alertó tanto a los visitantes como a los vecinos de los barrios linderos. Esa situación y probablemente la memoria emotiva sobre “mosquito = dengue”, confluyeron en un fuerte reclamo de los vecinos a las autoridades municipales. Pero a diferencia de otras oportunidades, en vez consentir la petición vecinal de “¡Hay que fumigar la reserva! ¡Prevengamos el dengue!”, las autoridades de la reserva y del municipio actuaron con consciencia ambiental y nos consultaron sobre que se podría hacer frente a esta problemática. La primera medida de nuestra parte fue informar casi con certeza que los mosquitos que estaban molestando a la población no eran de la especie Aedes aegypti. La segunda fue realizar muestreos de larvas y adultos durante la primavera-verano. Los resultados demostraron una importante diversidad de especies con predominio de Ochlerotatus albifasciatus, y una ausencia efectiva de Aedes aegypti. Por último, los fines de semana, cuando la reserva recibía mayor concurrencia, se realizaron charlas informativas sobre dengue y sobre la biología y ecología del vector.
Pese a la actual situación de transmisión de dengue, chikungunya y zika en la región, los vecinos no han vuelto a pedir la fumigación de la reserva. Nos preguntamos si se trata de ¿Un avance en la conciencia ambiental? ¿Más y mejor información? ¿O son resultado de lluvias escasas que afectan negativamente las abundancias de Ochlerotatus albifasciatus?.¡Esperemos que sean las dos primeras!
Maximiliano J. Garzón
Grupo de Estudio de Mosquitos
EGE-IEGEBA,FCEyN-UBA CONICET
Imagen de portada: Openclipart.