Literatura y Rock. El grito sagrado

La expansión del rock nacional en el ámbito cultural y su revalorización social como expresión en contra del autoritarismo.

Creado: 11 octubre, 2023 | Actualizado: 6 de noviembre, 2023

Partitura del Himno Nacional Argentina (Blas Parera/ Juan P. Esnaola), imagen tomada de Wikimedia Commons.

El retorno a la democracia en 1983 dio inicio a un periodo muy fructífero en el que el rock nacional se expandió en el ámbito cultural y se revalorizó socialmente, constituyéndose como expresión válida en contra del autoritarismo. A pesar de que durante los años en los que transcurrió la última dictadura cívico-militar ya se habían conformado muchas bandas de rock nacional, fue a partir de la guerra de Malvinas, de la prohibición de la música en inglés y del inicio del gobierno democrático encabezado por Raúl Alfonsín que se consagró como el género musical de la democracia.

Charly García, Luis Alberto Spinetta, Fito Páez, Fabiana Cantilo, Soda Stereo, Los Enanitos Verdes, Los Abuelos de la Nada, Man Ray, Ratones Paranoicos, Virus y Los Twist fueron algunas de las bandas de rock y artistas que se constituyeron a lo largo de esta década, siendo sus voces expresión de la democracia.

Las letras del rock argentino fueron testimonio de la época desde diferentes perspectivas musicales y bajo diversos conceptos estéticos. Sin embargo, en sus letras es posible encontrar ciertos patrones que se repiten. Por un lado, en todas ellas se enarbolan las banderas de los valores democráticos y la libertad asociados a un nosotras y/o nosotros que se construye en las letras frente a un ellas y/o ellos que remite al régimen militar, a sus integrantes y, sobre todo, a sus prácticas represivas. La memoria y la identidad, ya sea individual o colectiva, también se hacen presentes. En este sentido es que las letras de las canciones de rock de la década del ochenta funcionan como instancias para reflexionar y expresar ideas políticas vinculadas con la libertad y la democracia.

Estos temas encuentran su hito en 1990 cuando Charly García graba su versión del Himno Nacional Argentino de Vicente López y Planes y Blas Parera y la incluye en el álbum Filosofía barata y zapatos de goma. Ese mismo año, Charly cerró cada concierto de presentación de su nuevo disco con el Himno Nacional del que no cambió ni la melodía ni la letra, “salvo por ciertas inflexiones expresivas, pequeñas modificaciones de tono que pueden eventualmente interpretarse como indicios de cierto sufrimiento existencial frente a la realidad nacional presente o pasada” (Buch, 2008, p. 90).

Si se tienen en cuenta las modificaciones que el músico realiza en la versión rockera del himno, aquellas que lo inscriben dentro de la estética del rock nacional, se puede leer como un gesto de apropiación cultural que intenta acercar la canción patria a un nuevo público. Al mencionar las intenciones que lo llevaron a reversionar el Himno, Charly García (2021) dijo: “Se trata de mi propia visión de una canción que para muchos está asociada con malísimos recuerdos de bandas militares y que, a partir de mi versión, sirvió para que muchos pibes jóvenes y hasta personas de mi edad se acercasen a la canción patria”1.

El grito sagrado del himno nacional argentino es desacralizado, la nueva versión cantada por Charly García cobra relevancia como un gesto que busca democratizar el acceso a un símbolo patrio de gran importancia en la constitución de la memoria colectiva del pueblo.

Bibliografía:


1 Tomado de Diario Perfil (22 de octubre) Doce himnos inolvidables de Charly García para escucharlo siempre y un bonus track.

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