Primer ciclo:  Hay palabras y palabras

La propuesta es trabajar a partir de la lectura del poema "Palabras", de la poeta peruana Cecilia de Roggero, en el que se describen diferentes tipos de palabras y los sentidos que guardan. 

Se puede, entonces, iniciar un intercambio que reflexione sobre este tema a partir de las palabras del poema y de otras que propongan las y los estudiantes. Dinamizar el diálogo a partir de preguntas, como por ejemplo: ¿qué palabras son grandes? ¿Cuáles son cortas? ¿Cuáles hablan de emociones tristes? ¿Cuáles generan alegría? ¿Hay palabras justas? ¿Hay palabras que agreden o que hacen daño?

Luego, se sugiere abrir un espacio de conversación con las chicas y los chicos, para contarles qué significó el golpe de Estado, la suspensión de la democracia, la imposibilidad de votar y elegir presidentes, gobernadores y representantes; y la censura que se expresó en la prohibición de leer determinados libros y de escuchar canciones. 

A partir de esta conversación, la propuesta es comenzar, poco a poco, a reflexionar sobre el sentido social que tienen las palabras, a qué hechos históricos hacen referencia y la importancia de cómo nombrarlos. Se puede partir, por ejemplo, de las palabras “dictadura” y “democracia”, para luego ir sumando otros términos: “golpe de Estado” “censura”, “prohibir”, “memoria”, “derechos”, “justicia”, “elegir”, “votar”,  “Constitución”, “libertad de expresión”.

En un segundo momento, se propone trabajar sobre la palabra “memoria” a partir de un fragmento del cuento Guillermo Jorge Manuel José de la escritora australiana Mem Fox. El libro narra la historia de un niño que vive al lado de un hogar para ancianas y ancianos, y descubre que Ana, una de las personas que viven allí, perdió la memoria. Emprende entonces una búsqueda para ayudarla a recuperar sus recuerdos. Con la ayuda de Guillermo Jorge, Ana logra recordar.

A partir de la lectura del cuento se puede abrir una conversación: 

• ¿Qué es la memoria?, ¿cuándo pudo recordar la señora Ana?, ¿qué necesitó para poder recordar? A nosotras y nosotros, ¿qué nos gustaría no olvidar?, ¿qué cosas guardaríamos para poder recordar?  

Como complemento de esta actividad, se puede proponer a las chicas y los chicos que en sus casas, junto con sus familias, busquen objetos para llevar a un próximo encuentro y allí puedan compartir con sus compañeras y compañeros el significado de ese objeto, con qué recuerdo lo asocian, por qué tiene importancia y qué otras cosas les gustaría guardar para no olvidar. 

Esta propuesta puede completarse con la lectura de alguno de los cuentos censurados por la dictadura para pensar junto a las niñas y los niños por qué esas palabras no podían pronunciarse durante aquellos años. Por ejemplo, se puede trabajar con el recurso 24 de marzo, Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia (Portal Continuemos Estudiando, 2022), en el cual se proponen actividades a partir del cuento La planta de Bartolo, de Laura Devetach.

Segundo ciclo: crucigramas y acrósticos

Para el segundo ciclo, la propuesta es trabajar a partir de la construcción de crucigramas y acrósticos. Se trata de herramientas lúdicas para indagar sobre el significado de determinados conceptos y ejercitar de forma creativa la elaboración de textos.

En primer lugar, la propuesta consiste en armar dos grupos y que cada uno tenga que crear un crucigrama a partir de la elaboración de definiciones. Se puede comenzar con una palabra que estructure el crucigrama, por ejemplo, “MEMORIA” y que las y los estudiantes tengan que definir qué palabras utilizar que describan o se asocien a ese concepto. Por ejemplo, definir qué otras palabras se asocian y se cruzan perpendicularmente a "MEMORIA" para crear el crucigrama. Luego tendrán que realizar intercambios sintéticos sobre la construcción de sus definiciones, dando las pistas necesarias para que el crucigrama pueda ser resuelto. Cada grupo deberá resolver el crucigrama propuesto por el otro grupo.

A modo de cierre, se propone realizar una puesta en común en la cual se reflexione sobre la elección de los términos, qué otras palabras se podrían haber elegido, así como abordar las diferentes definiciones que podrán ser enriquecidas a partir del intercambio.

Ejemplo:

En un segundo momento, se puede proponer que elijan alguna de las palabras que conforman el crucigrama y que inventen acrósticos. Los acrósticos son pequeños textos con estructura poética, en los que las primeras letras o palabras de cada oración, conforman, a su vez, una palabra alusiva al texto. Pueden elaborarse de manera individual o en pequeños grupos. 

Ejemplo:

Donde
Escribimos
Memoria y no
Olvido
Comenzamos a 
Recorrer y 
Abrir
Caminos.
Imaginamos así otro
Amanecer

Los acrósticos pueden funcionar también como mensajes encriptados que develan alguna frase secreta (en lugar de una sola palabra). Se puede proponer, entonces, que elaboren acrósticos y que luego intervengan otros espacios de la escuela. Pueden invitar a otros cursos a  resolver sus enigmas a partir de la pregunta: ¿qué permanece oculto?

Ejemplo:

no olvidamos
una
noche
como
aquella, el
miedo
aisla, hace crecer la
soledad

Luego de trabajar los crucigramas o acrósticos se propone reflexionar sobre qué se recuerda el 24 de Marzo y cuál es el significado de estas palabras. Se sugiere abrir un espacio de intercambio entre los grupos de trabajo para construir de manera colectiva –a partir de estas reflexiones– las definiciones sobre los diferentes términos trabajados. 

La actividad puede enriquecerse con materiales que la o el docente acerque para trabajar con las y los estudiantes. Para este momento, se sugiere consultar la propuesta: Información y reflexiones sobre la dictadura cívico militar (Portal Continuemos Estudiando, 2024).

Luego, estas definiciones pueden compartirse a partir de la elaboración de afiches para distribuir y pegar en las paredes o carteleras de la escuela, como invitación a que la comunidad educativa lea estas palabras y también pueda expresarse en esta fecha.

La propuesta puede completarse con la lectura de alguno de los cuentos censurados por la dictadura para pensar junto a las niñas y los niños por qué esas palabras no podían pronunciarse durante aquellos años. Por ejemplo, es posible trabajar con la propuesta Cuentos prohibidos: La planta de Bartolo, de Laura Devetach (Portal Continuemos Estudiando, 2022).

Para sexto año, se sugiere completar la propuesta con el cuento El pozo, de Juan Sebastián Rochetti y las orientaciones docentes que lo acompañan (Portal Continuemos Estudiando, 2022).

Un relevamiento colectivo: las paredes hablan

Para conocer un poco más cómo se nombra y se representa la historia en las escuelas primarias, se invita a la comunidad educativa a que compartan qué dicen las paredes de sus instituciones. 

Para ello se convoca a fotografiar las palabras, leyendas, ilustraciones, imágenes que existan en las carteleras y/o en las paredes de las escuelas, relacionadas con la memoria, la verdad, la justicia y los Derechos Humanos y, posteriormente, realizar una puesta en común entre las y los estudiantes.

Fuente: Archivo DGCyE.